El Senado de EE.UU. aprobó este sábado el primer plan de presupuesto federal que sale de la cámara alta en cuatro años, luego de una cerrada votación 50-49 que se llevó a cabo poco antes del amanecer.
Cuatro legisladores demócratas se sumaron a los 45 republicanos del Senado pero sus votos no fueron suficientes para impedir la aprobación del plan tras una sesión maratónica.
El proyecto busca incrementar casi en un billón de dólares los ingresos provenientes de impuestos durante la próxima década modificando algunas exenciones de las cuales disfrutan hoy en día los estadounidenses más ricos. La medida recorta además los gastos gubernamentales en esa misma cantidad.
Los legisladores demócratas, que son mayoría en el Senado, fueron muy criticados hasta ahora por no haber conseguido la aprobación de un presupuesto desde 2009.
El resultado de la votación en el Senado diverge de otro proyecto presupuestario aprobado el jueves por la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, que reduce los gastos del gobierno sin elevar los impuestos.
El plan de los senadores demócratas es reducir el déficit federal en $1,85 billones de dólares en diez años mediante una combinación de aumentos tributarios y reducciones de gastos.
Los congresistas republicanos buscan ahorrar $4,6 billones de dólares durante el mismo período sin elevar los impuestos, y alcanzar un pequeño superávit para el 2023 adoptando severos recortes a programas de sociales y de salud que benefician a los estadounidenses de menos ingresos.
Cuatro legisladores demócratas se sumaron a los 45 republicanos del Senado pero sus votos no fueron suficientes para impedir la aprobación del plan tras una sesión maratónica.
El proyecto busca incrementar casi en un billón de dólares los ingresos provenientes de impuestos durante la próxima década modificando algunas exenciones de las cuales disfrutan hoy en día los estadounidenses más ricos. La medida recorta además los gastos gubernamentales en esa misma cantidad.
Los legisladores demócratas, que son mayoría en el Senado, fueron muy criticados hasta ahora por no haber conseguido la aprobación de un presupuesto desde 2009.
El resultado de la votación en el Senado diverge de otro proyecto presupuestario aprobado el jueves por la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, que reduce los gastos del gobierno sin elevar los impuestos.
El plan de los senadores demócratas es reducir el déficit federal en $1,85 billones de dólares en diez años mediante una combinación de aumentos tributarios y reducciones de gastos.
Los congresistas republicanos buscan ahorrar $4,6 billones de dólares durante el mismo período sin elevar los impuestos, y alcanzar un pequeño superávit para el 2023 adoptando severos recortes a programas de sociales y de salud que benefician a los estadounidenses de menos ingresos.
