Con el velo de la investigación del FBI levantado, Hillary Clinton y Donald Trump se movieron en direcciones opuestas el domingo, en las últimas horas de la campaña presidencial, una de las más volátiles de la historia, y que concluye con la votación del martes.
Luego de dos semanas bajo ataques por la interminable controversia de los emails, Clinton se declaró como la candidata de “el saneamiento y la reconciliación”, aun reconociendo que muchos de los votantes sienten aversión por ella precisamente por lo contrario.
“Esta elección es un momento para meditar”, dijo Clinton el domingo. “Es una decisión entre la división y la unidad, entre un liderazgo fuerte y firme y una bala perdida que pondría todo en riesgo”.
La ex secretaria de Estado dijo sentirse “esperanzada y optimista” sobre el futuro, en contraste con su oponente. “Creo que es justo decir que luego de meses de campaña, mi oponente tiene una visión muy oscura y divisiva de nuestro país. Algunas veces, cuando le oigo hablar, honestamente no se de qué país habla”, confesó.
Y efectivamente, Trump pintó las cosas con un matiz diferente, recurriendo a las reiteradas percepciones de un sistema corrupto.
“No se puede revisar 650.000 correos en ocho días”, dijo Trump en Michigan sobre las conclusiones del FBI. “No se puede, amigos. Hllary Clinton es culpable”
En Minneapolis también repitió el mismo mensaje. “Hillary Clinton es culpable. Ella lo sabe, el FBI lo sabe, la gente lo sabe. Y ahora es el momento de que la gente estadounidense haga justicia en las urnas el 8 de noviembre”.
En Leesburg, Virginia, aseguró que la elección del martes será “el Brexit multiplicado por 50”, en referencia al sorprendente resultado del referéndum británico para decidir la salida del Reino Unido de la Unión Europea, en el que las encuestas predijeron equivocadamente que serían ganadas por el voto a favor de quedarse.
Los comentarios de ambos tuvieron lugar horas después de que el director del FBI, James Comey, dijera al Congreso que una nueva revisión de los emails relacionados con Hillary Clinton no revelaron ninguna evidencia de algún delito.
La campaña de Clinton celebró el anuncio y la jefe de comunicaciones de la campaña, Jennifer Palmieri, dijo que el equipo estaba confiado en que Comey llegaría a esa conclusión.
“Nos alegra que este asunto quede resuelto”, dijo a los reporteros.
Faltando un día para las elecciones Clinton todavía parece sacar una pequeña ventaja a Trump en las encuestas. El republicano tiene un camino más complicado para llegar a la victoria que le obliga a ganar casi toda la media docena de estados más reñidos.
Este lunes, Clinton aparecerá con su esposo, Bill, y la primera dama, Michelle Obama, junto a Bruce Springsteen y Jon Bon Jovi en un evento en Filadelfia. También hará campaña en Grand Rapids, Michigan; Pittsburg y en Raleigh, Carolina del Norte.
Por su parte Trump irá a Florida, Carolina del Norte, Pennsylvania y New Hamphire.
