Un grupo de derechos humanos alertó que extremistas del Estado islámico están utilizando "violación como arma" contra mujeres étnicas yazidi raptadas desde el norte de Irak.
Amnistía Internacional (AI) publicó un informe detallando entrevistas con 42 mujeres y niñas que lograron escapar de los extremistas y varias otras que todavía están detenidas, describiendo las violaciones como crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.
El reporte detalla tortura física y psicológica, incluida la violación y otras formas de violencia sexual. Varias fugadas dijeron que los abusos probablemente condujeron a una joven de 19 años a suicidarse, y que varias otras intentaron acabar con sus vidas.
Donatella Rovera, asesora de respuesta a la crisis de AI, describió la carga física y psicológica como "catastrófica", y dijo que incluso aquellos que han escapado del grupo Estado islámico están todavía "profundamente traumatizados".
El informe dijo que el grupo no ha tratado de ocultar sus acciones, sino que usa su "brutal" y "despiadada" reputación para difundir el terror.
Amnistía Internacional ha pedido a las Naciones Unidas, organizaciones humanitarias y autoridades kurdas garantizar que las personas sometidas a violencia sexual tengan acceso a una atención adecuada y oportuna.
Combatientes islámicos atacaron a los yazidis en agosto, lo que obligó a miles de personas a huir a a la montaña Sinjar, donde permanecieron atrapados durante meses.
Fuerzas peshmerga kurdas, apoyados por ataques aéreos liderados por Estados Unidos, rompieron el cerco este sábado y han estado atacando a los extremistas desde entonces.