Funcionarios de salud instaron el viernes a los estadounidenses a continuar siguiendo las recomendaciones de distanciamiento social y otras medidas de higiene frente al coronavirus y advirtieron de que, en caso de nuevos repuntes, el país podría volver a las restricciones.
“Si los casos empiezan a subir de nuevo -y particularmente si aumentan dramáticamente- es importante reconocer que más esfuerzos de mitigación, como los que fueron implementados en marzo, pueden ser necesitados de nuevo”, dijo Jay Butler, el subdirector para enfermedades infecciosas de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), en una llamada con periodistas.
Butler, no obstante, aseguró que a nivel nacional el país ha sido “exitoso” en aplanar la curva de contagio y que el número de casos nuevos de coronavirus se ha mantenido relativamente estable durante un periodo de tiempo “prolongado”.
El funcionario hizo énfasis en que los estadounidenses deben seguir las medidas de contención del virus: mantener la distancia social, lavarse las manos regularmente y usar mascarilla para reducir el riesgo de infección.
En medio de una serie de protestas en todos el país, desencadenadas por la muerte del afroestadounidense George Floyd, cuando se encontraba bajo custodia policial, los CDC añadieron en su página web una serie de recomendaciones para personas que participen en “encuentros” de más de 10 personas.
Los CDC advierten que los encuentros con un gran número de personas, donde es difícil mantener la distancia recomendada de más de 1,8 metros, suponen un escenario de alto riesgo.
Por ello, recomiendan que las personas que participan en eventos donde “los individuos pueden alzar su voz para gritar consignas o cantar” usen tapabocas.
Los recomendaciones de los CDC “no tienen la intención de respaldar ningún tipo de evento en particular”, aseguró Butler.
Una serie de estados en EE.UU., incluyendo Texas, Florida y Arizona han levantado en las últimas semanas las restricciones en las medidas para evitar la propagación del coronavirus. Sin embargo, los casos de COVID-19 siguen aumentando en el país, con más de dos millones de contagios y 114.126 muertes, según datos de la Universidad John Hopkins