En el día de las elecciones nacionales no habrá partidos de fútbol, espectáculos musicales ni actos públicos hasta el cierre de las urnas. Hasta las 20.30 horas también rige la veda que prohíbe la venta de bebidas alcohólicas.
Será una jornada dedicada al acto cívico, indicó el jefe del Estado Mayor de la Policía, Luis Ituarte, responsable del operativo de seguridad a nivel nacional.
Ituarte dijo a la Voz de América que para asegurarse de que las elecciones transcurran con normalidad tienen en marcha un plan de seguridad que se enfocará en tres áreas: la custodia de las urnas y de las mesas de votación, garantizar el flujo del tránsito en las principales avenidas y rutas del país y el desplazamiento de los peatones.
El Ministerio del Interior se enfocará en el patrullaje, dijo Ituarte, aunque también destinará policías para el cuidado de las urnas.
En cuanto al patrullaje, habrá 9.000 policías divididos en tres turnos de ocho horas en todo el país. También habrá 6.000 efectivos de otras direcciones nacionales como Bomberos, Policía Caminera y Policía Técnica que estarán “a la orden”, explicó.
Con respecto al cuidado de las urnas, Ituarte dijo que habrá un total de 4.800 militares y 2.060 policías desplegados en todo el país a cargo de custodiarlas.
A la hora del cierre de los circuitos comienzan los festejos.
Cada partido político tiene una zona delimitada con vallado para los militantes. El Partido Nacional tiene su sede en la Plaza Matriz y el Frente Amplio se concentrará frente al hotel NH Columbia, en la Rambla Sur de la ciudad.
Ambos partidos tienen zonas de exclusión en la Ciudad Vieja, pero habrá un área “neutral” para evitar el contacto entre los militantes de los diferentes partidos, dijo Ituarte.
El Partido Colorado tiene asignado como lugar de festejo la calle Martínez Trueba. El Partido Independiente recibirá a los militantes en su sede en 18 de Julio y Asamblea Popular en Fernández Crespo y La Paz.
El ministro del Interior de Uruguay, Jorge Bruni, exhortó a los uruguayos a que tengan “un comportamiento político maduro, con respeto por el adversario, más allá de las pasiones que cada uno pueda tener, y pidiendo un respeto al festejo cualquiera sea el partido que lo haga”.