Gregory Baron, de 24 años y Ben Nelson, de 27, compraron con ilusión los boletos de dos dólares de la lotería Mega Millions con la esperanza de ganar los miles de millones de dólares que promete (2.200 millones hasta el momento) y unirse al club de los más ricos del mundo.
“Me incorporaría a los negocios y crearía mi propia compañía”, dijo Baron dentro de la terminal de autobuses de Port Authority en Manhattan. Agregó que de ganar, también le gustaría terminar de pagar sus deudas estudiantiles, al igual que la hipoteca de sus padres y donar a organizaciones de caridad.
“Me gustaría establecerme pero también trabajaría para no desgastarme en la nada”, dijo Baron.
Los jugadores de la lotería se enfrentan a posibilidades muy remotas, de una en 303 millones, para ganar el sorteo del martes en la noche. En comparación, la probabilidad de ser asesinado por un tiburón es de una en 3,7 millones, de acuerdo con International Shark Attack File.
Mega Millions alcanzó el récord mundial en un sorteo de lotería después de que no hubo ganadores del premio de mil millones de dólares el viernes. El récord anterior, de un sorteo de la lotería Powerball en el 2016, fue de 1.586 millones.
Alrededor de 280 millones de boletos fueron vendidos para el sorteo del sábado, cubriendo un 60% de todos los números de la combinación ganadora, dijo Seth Elkin, el portavoz de la Lotería de Maryland.
Se espera que los boletos vendidas para el sorteo del martes cubran el 75% de todas las combinaciones de números posibles, dijo Elkin.
Si un jugador acierta todos los seis números para ganar el gordo, puede optar por un pago inmediato en efectivo de 904 millones o recibir el total acumulado del premio a lo largo de 29 años.
Nelson, un administrador de post-producción basado en Manhattan, dijo que si gana la lotería viajaría y compraría una granja al norte de California donde criaría perros berneses de montaña.
“Primero me encargaría de todas las cosas aburridas y luego haría una película”, añadió.
En Chicago, un concurrido quiosco dentro del Centro de Transporte Ogilvie, no pudo mostrar en su pantalla la cantidad récord del premio porque 999 millones era el número más alto que su cartel electrónico podía mostrar.
“Son solo dos dólares. Me estoy gastando el dinero para el café en esto hoy”, dijo Rita Gómez, una jugadora ocasional de lotería que estaba comprando un boleto para ella, su hermana y dos amigos en una tienda en Chicago.
El premio de la lotería Powerball alcanzó el miércoles los 620 millones, convirtiéndolo en el quinto gordo más alto de la historia de Estados Unidos, después de que nadie obtuviera los seis números ganadores en el sorteo del sábado.
Si hay más de un ganador, el premio se dividirá proporcionalmente, como pasó en el 2012 con un gordo del Mega Millions de 656 millones, dijo un funcionario de la lotería.
Los boletos de Mega Millions se venden en 44 estados de la unión americana, más el distrito de Columbia y las Islas Vírgenes estadounidenses. Algunos estados permiten la venta de billetes online pero prohiben la compra fuera del estado y desde el extranjero.
Ambos gordos de lotería han aumentado recientemente debido a un cambio en las normas que reduce las posibilidades de ganar. Las posibilidades de ganar el Mega Millions se redujeron hace un año a 1 entre 259 millones para generar premios más grandes.
“Nunca voy a ganar pero hay que darle una oportunidad”, dijo Hank Kattan, de 75 años, en Manhattan. “Me gustaría cambiar mi vida”.