En el tradicional barrio El Prado, todos los años, vaqueros, trovadores y la mejor culinaria tradicional se dan cita para iniciar la llamada “semana criolla”.
Como visitante o turista, es sorprendente ver como los uruguayos se reúnen para rendirle honor a sus tradiciones, es por ello, que en un amplio terreno se pueden observar, como en cualquier feria, caballos, vaqueros, cantantes, trovadores, bailarines y personalidades políticas.
La llamada “Rural del Prado” tiene espacio para todos. Los payasos visten de encanto a los menores, mientras que la música ameniza a los adultos.
El espectáculo que comienza a las nueve de la mañana y culmina en la noche, presenta además muestras de vino uruguayo y artesanías de todo tipo.
En medio de la tarde, los jinetes salen al ruedo, al mejor estilo de los cowboys de Estados Unidos, para enfrentar caballos salvajes y domarlos frente al público. No es una tarea fácil, de hecho riesgosa, pero allí están ellos, los llamados gauchos.
Hay varias modalidades, desde montar con sillas hasta “pelo”, es decir, monta directo sobre el animal. El ganador de esta jornada, toma la gran bandera del Uruguay y da la vuelta por el campo en honor a su labor y su triunfo.
La comida no puede faltar, desde un buen asado, hasta unos churros o torta frita. La culinaria se mezcla entre nuevos sabores y los tradicionales, y por donde se camina hay olor a mate, la bebida tradicional, una especie de te. De hecho, es tan tradicional, que existen expendios de agua caliente para llenar el termo.
El público puede ascender a los 200.000 espectadores
La llamada “Semana criolla del Prado” es un evento organizado por la Intendencia de Montevideo desde 1925. Otro evento similar se realiza paralelo en el parque Franklin Delano Roosevelt.
