El gobierno alemán condenó el miércoles una serie de incidentes en la víspera de Año Nuevo en que policías y bomberos fueron agredidos y heridos, principalmente con fuegos artificiales.
Los juerguistas en todo el país tradicionalmente celebran el nuevo año lanzando una gran cantidad de fuegos artificiales en lugares públicos. Sin embargo, los más recientes festejos se vieron empañados por el uso de fuegos artificiales contra personal de emergencia.
En Berlín, 30 policías y un bombero resultaron heridos en enfrentamientos o agresiones durante la víspera de Año Nuevo, lo que llevó a 400 arrestos, indicaron autoridades municipales. Cientos de policías de todo el país fueron desplegados en la capital para ayudar a evitar más actos de violencia.
Cinco personas murieron y cientos resultaron heridas tras ser impactadas accidentalmente por fuegos artificiales, reportó la agencia de noticias alemana DPA.
“El despliegue de fuertes fuerzas policiales de los estados federales y la policía federal y una represión temprana y consistente son los medios adecuados contra los perpetradores de violencia y caos", dijo la ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser. "Sin embargo, los numerosos arrestos tan solo en Berlín y los reiterados ataques contra los policías también muestran que esta represión era absolutamente necesaria”.
Faeser deseó a todos los agentes heridos una pronta recuperación y prometió que todos los perpetradores serán “perseguidos y castigados con la máxima severidad”.
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