Jugando con los dientes apretados y mucha determinación, el Heat de Miami se recuperó en Chicago para derrotar con autoridad de los Bulls e igualar la serie final del este en el básquetbol de la NBA.
LeBron James lideró la ofensiva de Miami en el último cuarto para concluir una consistente actuación con 29 puntos y 10 rebotes, mientras Dwyane Wade agregó 24, para la victoria del Heat por 85-75 sobre los Chicago Bulls.
Una vez más el partido se definió en la defensa, lo cual queda revelado por el bajo goleo. Esta vez, el predomonio fue del Heat, que sometió a Derrick Rose, el jugador más valioso de la liga, a una intensa y desgastante presión. Los Bulls no resistieron la presión que puso Miami y al final se quedaron totalmente sin respuesta física.
La situación fue totalmente al primer partido, donde el Heat fue el que se mostró débil físicamente, y los jóvenes Bulls consiguieron imponer su ritmo. Sin embargo, dos días más tarde, Chicago pareció pagar el precio por la intensidad del primer encuentro y perdió su primer partido de la temporada ante Miami y de local.
Ahora el Heat tiene la ventaja de viajar a Miami para los dos siguientes partidos. "Con el mejor clima en el sur de Florida, esperamos sentirnos aún más fuertes", dijo LeBron James al final del partido.
Al igual que ocurrió en el partido final de la serie ante los Celtics de Boston, LeBron James tomó el mando del equipo en los últimos minutos y anotó 9 puntos consecutivos, incluyendo un triple de larga distancia.
Los Bulls hicieron un enorme esfuerzo al inicio del último cuarto, al reducir una ventaja de 11 puntos y empatar el partido, pero se quedaron sin resto para el tramo final y no sólo no pudieron contener a James, sino que fueron dominados por la defensa del Heat, al punto que de los 21 puntos que marcó Rose, en el último cuarto márcó sólo dos.
Mientras tanto, en la noche de este jueves 19 de mayo, en la Conferencia del Este, los Mavericks de Dallas volverán a ser locales ante los Thunder de Oklahoma City, tras la victoria en el primer encuentro.