El presidente iraquí, Fouad Maasum, dijo que la barbarie de los militantes del grupo Estado islámico que han tomado control de una tercera parte de Irak y una parte de Siria ha servido para unir a facciones previamente divididas en la región.
En una entrevista con la Voz de América durante su reciente visita a Nueva York, Maasum dijo que el grupo EI está perdiendo el apoyo de los musulmanes sunitas que los militantes tenían al comienzo de su campaña.
“El liderazgo político de los sunitas está totalmente opuesto al grupo Estado islámico y saben que los sunitas no están comprometidos con ellos”, dijo el presidente.
“Ahora que los sunitas han visto cómo el grupo Estado islámico decapita, están muy preocupados. La conducta dictatorial del grupo y su filosofía retrógrada los ha asustado a todos”, añadió.
En su discurso ante la Asamblea General de la ONU, la semana pasada, el presidente iraquí dijo que el grupo Estado islámico debe ser erradicado completamente o surgirá nuevamente.