En lo que quizás sea un nuevo comienzo, unos 300 menores inmigrantes que ingresaron a EE.UU. por la frontera sur iniciarán clases en diferentes escuelas de Miami, se informó.
Se espera que unos 500 menores centroamericanos adicionales entren a las escuelas de Miami en las próximas semanas, informó la oficina de la integrante de la Junta Escolar del condado Miami-Dade, Raquel Regalado.
La semana pasada se informó que la Junta Escolar del condado solicitó fondos al gobierno federal para financiar la educación de estos menores indocumentados que asistirán a las escuelas públicas locales.
Regalado participó recientemente de un donativo de útiles escolares, al que también asistió el presidente de la Organización Hondureña Francisco Morazán, Francisco Portillo.
"Estamos muy agradecidos con la Junta Escolar del condado de Miami-Dade que, unánimemente, acordaron dar educación a estos niños y eso es muy importante", señaló Portillo.
En aquella entrega se donaron varias mochilas, las cuales fueron distribuidas el pasado viernes, según Portillo, quien instó a la población a mantener la entrega de cuadernos, libretas, lapiceros y demás útiles para estos niños, algunos de los cuales aún permanecen en centros de acogida de Miami.
La organización Francisco Morazán está solicitando al gobierno federal que estos niños logren regularizar su estatus en el país y eviten la deportación.
"Estamos luchando con todos estos niños que están solos, sin sus familiares, para ver de qué manera podemos conseguir que se les otorgue un estatus como el de refugiado político", puntualizó.
No está claro cuánto tiempo podrán quedarse los niños en Estados Unidos, puesto que la Casa Blanca y algunos legisladores han dejado claro que los niños indocumentados que hayan entrado de manera ilegal serán procesados ante un juez de migración y devueltos a sus países, salvo en casos especiales.