Un pequeño alivio ante la ola de calor que afecta Estados Unidos, se espera para las próximas semanas.
El Servicio Nacional de Meteorología muestra una leve tendencia a la baja de aproximadamente diez grados Fahrenheit, lo que mantendrá la temperatura entre 86 y 82 grados Fahrenheit (30-27 grados centígrados).
Aunque en general el calor persistirá en lo que resta de verano, que finaliza oficialmente a finales de septiembre, es posible que al menos durante algunos días, un frente frío procedente de Canadá refresque algunas regiones del centro y oeste del país.
Mientras tanto, ciudades del este del país como Nueva York y Washington se preparan para un fin de semana con temperaturas que superarán los 93 grados Fahrenheit, aunque con sensación térmica de 100 grados (40 grados centígrados), debido a la humedad.
Hasta el momento una persona ha muerto a consecuencia de las altas temperaturas. El Servicio Nacional de Meteorología aseguran que en promedio, las olas de calor cobran más vidas cada año que las inundaciones, relámpagos, tornados y huracanes juntos.
El Servicio Nacional de Meteorología muestra una leve tendencia a la baja de aproximadamente diez grados Fahrenheit, lo que mantendrá la temperatura entre 86 y 82 grados Fahrenheit (30-27 grados centígrados).
Aunque en general el calor persistirá en lo que resta de verano, que finaliza oficialmente a finales de septiembre, es posible que al menos durante algunos días, un frente frío procedente de Canadá refresque algunas regiones del centro y oeste del país.
Mientras tanto, ciudades del este del país como Nueva York y Washington se preparan para un fin de semana con temperaturas que superarán los 93 grados Fahrenheit, aunque con sensación térmica de 100 grados (40 grados centígrados), debido a la humedad.
Hasta el momento una persona ha muerto a consecuencia de las altas temperaturas. El Servicio Nacional de Meteorología aseguran que en promedio, las olas de calor cobran más vidas cada año que las inundaciones, relámpagos, tornados y huracanes juntos.