El presidente ruso Vladimir Putin firmó este martes un decreto para hacer de Crimea parte de Rusia, luego de asegurar que no piensa invadir otras regiones porque “no queremos dividir a Ucrania”.
Simultáneamente, el Kremlin anunció medidas reciprocas a las sanciones impuestas por Estados Unidos y Europa contra funcionarios rusos, que incluye sanciones a senadores estadounidenses.
En su intervención ante el parlamento ruso televisada a toda la nación, el mandatario justificó el referendo en Crimea como “legal y convincente”, asumiendo el mensaje de que “en el corazón de corazones del pueblo” en esa región “siempre han sido parte de Rusia”.
Por momentos Putin utilizó un lenguaje más propio de la guerra fría, lamentando “la histórica injusticia” del rompimiento de la antigua Unión Soviética.
“En el futuro debemos ser tan fuertes como nunca, para responder a los retos. Vamos a enfrentar la oposición de Occidente”, agregó Putin.
Putin subrayó que Rusia tiene que responder a lo que describió como un plan de Occidente para llevar a Ucrania a su esfera de influencia y lo acusó de promover el levantamiento que finalmente sacó del poder al presidente ucraniano Viktor Yanukovich.
Simultáneamente, el Kremlin anunció medidas reciprocas a las sanciones impuestas por Estados Unidos y Europa contra funcionarios rusos, que incluye sanciones a senadores estadounidenses.
En su intervención ante el parlamento ruso televisada a toda la nación, el mandatario justificó el referendo en Crimea como “legal y convincente”, asumiendo el mensaje de que “en el corazón de corazones del pueblo” en esa región “siempre han sido parte de Rusia”.
Por momentos Putin utilizó un lenguaje más propio de la guerra fría, lamentando “la histórica injusticia” del rompimiento de la antigua Unión Soviética.
“En el futuro debemos ser tan fuertes como nunca, para responder a los retos. Vamos a enfrentar la oposición de Occidente”, agregó Putin.
Putin subrayó que Rusia tiene que responder a lo que describió como un plan de Occidente para llevar a Ucrania a su esfera de influencia y lo acusó de promover el levantamiento que finalmente sacó del poder al presidente ucraniano Viktor Yanukovich.