Rick Gates, un ex colaborador de la campaña presidencial de Donald Trump, se declaró culpable el viernes de conspirar y mentir en la investigación de la injerencia rusa en las elecciones de 2016, que dirige el fiscal especial Robert Mueller.
Gates llegó a un acuerdo por el que se compromete a cooperar y a proveer información al fiscal especial, tras 24 horas frenéticas en las que fue servido con nuevos cargos, cambió de abogados y admitió su culpabilidad.
A cambio de la admisión de culpabilidad, el gobierno acordó a retirar los demás cargos en su contra presentados tanto en Washington como en Virginia.
Gates, socio de muchos años de Paul Manafort, ex director de la campaña de Trump, formuló la declaración en un tribunal federal en Washington. En la víspera, un jurado de instrucción federal en Virginia presentó un acta de 32 puntos contra Gates y Manafort, con acusaciones de evasión impositiva y fraude bancario. Fue el segundo conjunto de acusaciones contra los dos hombres.
Gates, de 45 años, es la quinta persona —por lo que se sabe públicamente— que se declara culpable en la investigación sobre presunta colusión entre la campaña de Trump y el Kremlin durante la campaña de 2016. Un vocero de Mueller no respondió a los pedidos de declaraciones.
La semana pasada, otra acta de acusación causó estupor al exponer una amplia operación de injerencia por parte de Rusia, que comenzó en 2014 y empleó cuentas en redes sociales y maniobras políticas en el terreno para promover la campaña de Trump, perjudicar la de Hillary Clinton y sembrar la división y la discordia en el electorado estadounidense.
Gates se había declarado inocente y enfrentaba una pena de hasta 12 años y medio de prisión bajo los cargos de actuar como agente extranjero no registrado y asociarse ilícitamente con Manafort para lavar millones de dólares mientras cabildeaban a favor de un partido político ucraniano prorruso.
Manafort dijo en un comunicado colgado en Twitter, que “a pesar de la admisión de culpabilidad de Rick Gates hoy, yo continúo manteniendo mi inocencia. Había tenido la esperanza y esperaba que mi colega de negocios hubiera tenido la fortaleza de continuar la batalla para probar nuestra inocencia. Por razones que todavía están por verse él decidió hacerlo de otra manera. Esto no altera mi compromiso de defenderme contra la cantidad de cargos falsos contenidos en las acusaciones en mi contra”.
Manafort dirigió la campaña de Trump de junio hasta agosto de 2016. Gates fue reclutado en la campaña por Manafort y se quedó aún después de que Manafort fue despedido unos meses después de darse a conocer sus conexiones con Rusia.
