(Video reportaje)
Au pair, es una palabra francesa que significa “a la par” o “igual a” y que se usa para referirse a una persona acogida temporalmente por una familia a cambio de un trabajo.
Bajo ese concepto, cada año, unos 20.000 jóvenes extranjeros, en su mayoría mujeres, vienen a Estados Unidos con visas especiales para trabajar cuidando niños en residencias privadas. A cambio les dan un lugar donde vivir, alimentación y la posibilidad de aprender el idioma de la familia anfitriona; y, además, les pagan un salario.
En Estados Unidos -y en otros países- las au pair se han convertido en parte de un programa de intercambio cultural que recibe buenas críticas de la mayoría de las familias anfitrionas y de quienes participan como niñeras, pero no todos los casos son iguales.
Algunos grupos de defensa de derechos laborales, denuncian que las au pairs están mal pagadas y explotadas por un sistema que, si bien ofrece una buena oferta para las familias anfitrionas, no trata de manera igual a todas las participantes del programa.
Además, cuando surgen reclamos, las au pairs pueden ser fácilmente removidas del programa, reemplazadas y retornadas a sus países de origen.
En este especial de la Voz de América, presentamos 3 casos de au pairs y de cuales son los riesgos o desventajas a los que pueden enfrentarse.
El sueño americano convertido en pesadilla
Jimmy Li vino a Nueva Jersey desde China para ser un Au pair. Quería pulir su inglés y experimentar la vida en Estados Unidos. Pero cuando la familia anfitriona de Jimmy se quejó del cuidado de su hijo, por problemas que él niega, la agencia que reclutó a Jimmy lo envió abruptamente a casa, su sueño de vivir un año en los Estados Unidos se desvaneció.
Un "excelente trato" para las familias, pero no las au pairs
Katerinee Rodríguez se especializó en relaciones internacionales en su México natal. Ahora, ella trabaja como au pair para su madre anfitriona Gitika Kaul en un suburbio de Washington, D.C.
Según Kaul, su au pair es una "gran regalo" para sus dos hijos. Y aunque Rodríguez ama su trabajo y a la familia con la que trabaja, su salario es tan bajo que tiene que pedir que le envíen dinero desde México.
¿Quién defiende los derechos de Au Pair?
Johanna López vino a Estados Unidos desde Colombia para ser au pair, pero la experiencia no resultó ser lo que ella esperaba.
Su familia anfitriona le pidió que hiciera tareas de limpieza, cocina y otras cosas no estipuladas, además del cuidado de los niños.
Su historia muestra por qué los críticos quieren que el Departamento de Estado ejerza más supervisión sobre el programa de au pairs.
Con colaboración de Herbert Zepeda.