![La ex legisladora estatal de Maryland Ana Sol Gutiérrez, durante protesta frente a sede diplomática salvadoreña en Washington, el 28 de marzo de 2023, urgió explicar a los salvadoreños en EEUU lo que está sucediendo en el país. [Foto: Tomás Guevara, VOA]](https://gdb.voanews.com/01000000-0a00-0242-e8ed-08db2fb7c8aa_w250_r1_s.jpg)
Representantes del Movimiento de Víctimas del Régimen de Excepción en El Salvador (MOVIR) y de otras organizaciones llegaron este martes a las puertas de la embajada del país centroamericano en Washington para exigir que se libere a cientos de salvadoreños detenidos bajo el Estado de excepción pese a no tener vínculos con las pandillas.
La exlegisladora estatal de Maryland Ana Sol Gutiérrez explicó durante la concentración que la falta de información de los salvadoreños en el exterior es crítica, porque no logran entender la situación de “violación de derechos humanos" en El Salvador.
"Estuve en una estación de radio esta mañana para explicar la situación que atraviesa el país y la gente comenzó a acusarme de apoyar a pandilleros, eso no es así, lo que decimos es que queremos que se haga una ley y que se aplique a todos los pandilleros, a todos los criminales; pero con juicios, respetando las garantías legales y dejando en libertad a los que no tienen vínculos con pandillas”, dijo la exlegisladora.
Consuelo Gómez, familiar de un detenido en las cárceles salvadoreñas a quien -según dice- ni parientes ni abogados han podido visitar para corroborar su estado, agrego que el estado de las familias en esa situación "es muy doloroso".
Gómez matizó que en el caso de las fotografías de pandilleros apiñados y llenos de tatuajes que muestra el gobierno en los traslados carcelarios son criminales que ya están purgando largas condenas desde hace muchos años, y que son distintos a los miles de detenidos durante el Estado de excepción que “están como secuestrados”.
"Cuando se habla de presos por el encarcelamiento de inocentes, Nayib Bukele saca en fotografías a los pandilleros, pero esos pandilleros ya estaban condenados, eso no tiene nada que ver con aquellos por los que ahora estamos peleando”, dijo en alusión a los centenares de detenidos cuyas familias y comunidades reconocen como “sin nexos” con estructuras criminales.
El gobierno salvadoreño ha reconocido que hay "márgenes de error" en las capturas que hace la Policía Nacional Civil, pero a la fecha no ha presentado un plan para superar los escollos que señalan defensores de derechos humanos.
Consuelo Gómez lamentó que para los capturados en el primer año de Estado de excepción “nunca hay una cámara para mostrar la situación en la que se encuentran”; los manifestantes también mostraron en una pancarta los rostros de algunos de los aproximados 111 salvadoreños que -según cálculos de diversas organizaciones no gubernamentales- han fallecido dentro de las prisiones, sobre los cuales -en la mayoría de casos- no hay informes forenses para determinar las causas de las muertes.
Organizaciones de derechos humanos en El Salvador como Cristosal han relatado a la Voz de América que con el apoyo de familiares llevan documentados más del centener de casos, cuando los parientes se han acercado a las organizaciones luego de desobedecer las órdenes de no abrir los féretros cuando se los entregan las autoridades.
En esos casos han fotografiado los cadáveres para evidenciar hematomas y golpes en la cabeza, cavidad torácica y espalda, y que en la mayoría de casos no coinciden con la escasa información que proporciona el informe forense. De los registros de fallecidos a la fecha sólo en dos casos se habrían comprobado nexos con las pandillas, según estas organizaciones.
El salvadoreño Douglas Chicas, quien participó en la concentración frente a la embajada de El Salvador en Washington dijo que la solidaridad con las víctimas debe ir más allá de ver el país sólo “como un escenario electoral” en 2024, y que con cada persona inocente detenida y que muere en esas condiciones "los salvadoreños nos debemos sentir identificados".
El gobierno salvadoreño ha venido defendiendo su política hasta el momento. El presidente Bukele recordó este lunes, al cumplirse el primer aniversario del estado de excepción, que cuándo tomó la decisión de retirar las garantías constitucionales en el país, se había registrado una matanza de más de 80 salvadoreños y destacó que el día del aniversario había cero homicidios.
"Seguiremos trabajando por la seguridad de los salvadoreños, aunque reclamen las ONGs de derechos humanos" dijo el mandatario.
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