Dos trabajadores de la planta nuclear de Fukushima fueron hospitalizados de emergencia por lesiones en las piernas, después que estar expuestos a altos niveles de radiación.
El jefe de Gabinete japonés, Yukio Edano, dijo, este jueves, que tres trabajadores recibieron altos niveles de radiación mientras trabajaban en la reparación de las vitales bombas de enfriamiento del reactor número 3 de la planta nuclear de Fukushima, considerado el más peligroso de los seis reactores debido a que sus varillas de combustible incluyen plutonio inestable.
Edano dijo que los tres estaban extendiendo cables de electricidad en el sótano del edificio que alberga el reactor cuando dos de ellos pisaron agua contaminada que hizo contacto con las piernas. Un portavoz del operador de la planta dijo que los dos trabajadores fueron trasladados a un hospital equipado para tratar casos de radiación.
El trabajo de reparación se reanudó después que la planta estuviera filtrando peligrosa radiación desde que los sistemas de enfriamiento fueron dañados por el devastador terremoto y tsunami el pasado 11 de marzo.
La radiación ha llegado a lugares tan alejados como Tokio, donde las autoridades prohibieron el consumo de agua corriente para los bebés y la comercialización de alimentos contaminados por la radiactividad de la central de Fukushima al detectar niveles de yodo radioactivo en el suministro de agua potable, admisibles en el organismo de los adultos, pero el doble del nivel permitido para menores.
Los nuevos datos del tsunami y posterior terremotos de la Policía Nacional apuntan a 9.700 muertos y 16.500 desaparecidos tras el desastre. Unas 300.000 personas están viviendo en refugios de emergencia.
El embajador estadounidense John Roos viajó a uno de los refugios en la prefectura de Miyagi, una de las más afectadas. Rodeado de niños aplaudiendo y mujeres llorando, el diplomático dijo que durante la visita había sido testigo de lo mejor de la humanidad. Dijo a las víctimas que los estadounidenses están orando por ellos.
