El fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, detalló en la tarde del martes los hechos detrás de la histórica acusación contra el expresidente de Estados Unidos Donald Trump, quien enfrenta 34 cargos por falsificación de registros de negocios.
“No podemos normalizar ni normalizaremos conductas delictivas graves. El acusado hizo repetidamente declaraciones falsas en los registros comerciales de Nueva York”, dijo Bragg a la prensa al finalizar la audiencia de Trump que se realizó en la Corte Criminal de Manhattan.
De acuerdo con la Fiscalía, Trump habría incurrido en falsificación de documentos en 34 ocasiones. Según la fiscalía, el expresidente afirmó falsamente que estaba pagando a Michael Cohen, su exabogado y mediador, por servicios legales realizados en 2017.
En realidad, apuntan, Trump estaría reembolsando a Cohen por pagos realizados justo antes de las elecciones de noviembre de 2016 para silenciar una información negativa y “mejorar las posibilidades” de Trump de ganar la contienda.
“Se trata de 34 registros comerciales; 34 declaraciones falsas y registros comerciales que ocultaban conductas delictivas”, insistió Bragg.
Los sobornos se habrían pagado a tres personas. Una de ellas, la actriz porno Stormy Daniels, a quien Cohen pagó 130.000 dólares para para comprar su silencio sobre un presunto amorío entre ambos una década antes.
El pago de 130.000 dólares, además, superaba el límite federal de contribuciones económicas sin declarar que se pueden hacer durante una campaña electoral, lo que constituyó otra actividad ilícita.
Bragg detalló también pagos hechos a Karen McDougal, quien era modelo de la revista PlayBoy, a través de la compañía American Media, Inc., para evitar que hiciera declaraciones negativas sobre Trump durante la campaña presidencial.
“Estas personas participaron en un esquema ilegal. Un esquema que infringió la ley electoral de Nueva York, que tipifica como delito la conspiración para promover una candidatura por medios ilícitos”, agregó Bragg.
Los reembolsos a Cohen se habrían extendido por nueve meses, y en ocasiones, los cheques habrían sido firmados directamente por Trump. Este dinero fue reportado ante las autoridades fiscales de Nueva York como ingresos, en lugar de reembolsos, lo que constituyó otra “conducta constitutiva de delito grave”.
“¿Por qué Donald Trump hizo repetidamente estas declaraciones falsas? Las pruebas demostrarán que lo hizo para encubrir delitos relacionados con las elecciones de 2016”, agregó Bragg.
Las leyes del estado de Nueva York tipifican como un delito grave la falsificación de documentos comerciales con intención de defraudar y ocultar otro delito.
Nuevas pruebas
Al cuestionarle sobre la razón por la que la acusación se realiza en este momento y no en años anteriores, Bragg aseguró que durante los últimos meses tuvo acceso a nuevas evidencias que permitieron avanzar el caso.
“Hemos tenido más pruebas a disposición de la oficina y la oportunidad de reunirnos con testigos adicionales. Como he dicho antes, llevo 24 años haciendo esto. No llevo casos antes de una investigación exhaustiva y rigurosa. Ahora, una vez hecho esto, se ha presentado el caso.
Entre el material revisado que sirvió de prueba, agregó, se encuentran mensajes de texto, correos electrónicos, registros telefónicos y conversaciones con testigos.
Bragg aseguró que en el estado de Nueva York, tienen un “interés especial” en atender casos de declaraciones comerciales falsas, debido a la actividad financiera que se lleva a cabo de la ciudad.
Durante la audiencia realizada el martes en el tribunal estatal de Nueva York, Trump se sentó con las manos cruzadas mientras presentaba su declaración flanqueado por sus abogados. "No culpable", dijo cuando se le preguntó cómo se declaraba.
Después de la audiencia, Trump aseguró que esta fue "impactante para muchos" porque la fiscalía no presentó "sorpresas".
"Prácticamente todos los expertos legales han dicho que no hay caso aquí. ¡No se hizo nada ilegalmente!", argumentó el expresidente pocos minutos después de despegar desde Nueva York con destino a su residencia en Palm Beach, Florida, a través de la red social Truth Social.
En Nueva York, la falsificación de documentos comerciales es un delito menor punible con un máximo de un año de cárcel, pero se eleva a delito grave punible con hasta cuatro años de prisión cuando se hace para promover o encubrir otro delito.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.