El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, hizo una amenaza velada el martes al sugerir que su país podría liberar a prisioneros del grupo extremista Estado Islámico y enviarlos de vuelta a Europa. El gobierno turco está molesto por la decisión de la UE de sancionar a Turquía por sus perforaciones en busca de gas en aguas del Mediterráneo cerca de Chipre.
En declaraciones a la prensa antes de viajar a Estados Unidos, Erdogan dijo que Turquía seguirá repatriando a combatientes extranjeros de la milicia radical aunque sus países de origen se opongan.
“Deben revisar su actitud hacia Turquía, que retiene a tantos miembros del grupo EI en prisión y los controla en Siria”, dijo Erdogan a los miembros del bloque, al día siguiente de que la UE presentara un sistema para sancionar a Turquía. “Estas puertas se abrirán y se seguirán enviando estos miembros del grupo EI que se les han empezado a enviar. Entonces podrán ocuparse de su propio problema”.
Turquía ha emprendido un programa de repatriaciones para devolver a los combatientes extranjeros capturados a sus países de origen. Ankara ha señalado que su país no es un “hotel” para milicianos del grupo EI y criticado a los países occidentales por resistirse al regreso de ciudadanos que se unieron a las filas de la milicia radical cuando intentaba establecer un “califato” en Irak y Siria.
Ankara deportó el lunes a ciudadanos de Estados Unidos, Dinamarca y Alemania, y anunció planes de expulsar pronto a otros siete alemanes, dos irlandeses y 11 franceses.
Hay unos 1.200 milicianos extremistas en prisiones turcas y 287 miembros del grupo EI, incluidos mujeres y niños, fueron capturados durante la ofensiva turca iniciada el mes pasado en Siria, según indicaron las autoridades turcas la semana pasada.
La última disputa de Ankara con Bruselas gira en torno a las prospecciones de gas cerca de Chipre, miembro de la UE. Barcos perforadores turcos escoltados por buques de guerra iniciaron las prospecciones este verano en aguas reclamadas por Chipre para su zona económica exclusiva. Turquía dice estar protegiendo sus derechos y los de los chipriotas turcos en la isla dividida.