El Servicio de Inmigración y Ciudadanía de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) anunció cambios en el proceso de los casos de asilo, volviendo al enfoque “últimos en entrar, primeros en salir” para evitar fraudes y abusos del sistema.
“El fin es disuadir a las personas de utilizar los retrasos en el procesamiento de casos de asilo con el único propósito de obtener autorización de empleo por medio de presentación de solicitudes de asilo frívolas, fraudulentas y que no son meritorias de ninguna otra manera”, indicó USCIS en un comunicado.
De esta manera, USCIS intenta frenar el crecimiento de solicitudes de asilo experimentado en los últimos años y que ha causado un retraso considerable en la resolución de casos.
En el comunicado, la agencia señala que actualmente enfrenta una crisis en el nivel de atrasos de 311,000 casos de asilo pendientes hasta el 21 de enero de 2018, que hace que el sistema de otorgamiento de asilos sea vulnerable al fraude y el abuso.
Para explicar los alcances de esta decisión, la Voz de América entrevistó al abogado experto en Inmigración, Willy Allen, y remarca que la medida tiende a lograr que la gran cantidad de casos retrasados hasta ahora puedan agilizarse.
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Para enfrentar la crisis, el USCIS ha establecido prioridades para programar las entrevistas de las peticiones de asilo en tres categorías.
Primero, empezarán a programar entrevistas que habían sido reprogramadas por solicitud del beneficiario o por requerimiento de la oficina de inmigración. Segundo, serán programados para entrevistas los casos que tienen 21 días o menos desde que se solicitó el amparo migratorio. Y, tercero, se programarán entrevistas para todos los casos pendientes empezando con los más recientes.
Los casos no aprobados serían colocados en proceso de deportación.
"Los retrasos en el procesamiento oportuno de las solicitudes de asilo son perjudiciales para los solicitantes de asilo legítimos", dijo el director del USCIS, L. Francis Cissna. "Los atrasos persistentes pueden explotarse y utilizarse para socavar la seguridad nacional y la integridad del sistema de asilo", agregó.
Venezolanos, los primeros afectados
Según la Asociación Americana de Abogados de Inmigración (AILA), capítulo Sur de la Florida, todas las citas para entrevistas que se han recibido hasta el momento corresponden a ciudadanos venezolanos que ingresaron al país recientemente.
Sobre si este cambio del Servicio de Inmigración y Ciudadanía pueda generar una ola de deportaciones de venezolanos, abogados citados por el Miami Herald, aseguran que si el caso tiene un buen sustento no tiene por qué ser rechazado.
Lo que sí puede afectar la aceleración de las citas es que algunos solicitantes deban producir la evidencia que documenta su caso con más rapidez, ya que no tendrán tres, cuatro o cinco años para obtenerla.
Solamente en 2016, Estados Unidos recibió 14,773 aplicaciones de ciudadanos de este país suramericano. En el 2015, fueron 5,605 venezolanos que solicitaron el asilo, lo que muestra que se ha producido un gran incremento.
Según USCIS, el aumento de retrasos en el procesamiento ha sido de más de 1.750 por ciento y el índice de aumento de nuevas peticiones de asilo ha sido más del triple.
Colaboración con la entrevista de Gioconda Tapia Reynolds