El gobernador del departamento fronterizo de Arauca, José Facundo Castillo, reconoció el viernes que existe "preocupación" por la situación de inmigrantes venezolanos que se encuentran en su territorio y no quieren regresar a su país.
"Esta población que está residenciada en su gran mayoría en Arauquita, en su gran mayoría no quiere retornar a su territorio. Esto nos está generado una problemática y no queremos que esto se nos salga de las manos y la comunidad está pidiendo a apoyo para la población colombiana", señaló el funcionario, durante el Foro Virtual Visibles por Arauca, organizado por Migración Colombia.
Arauca, según el gobernador, es el segundo departamento con mayor población de migrantes venezolanos, después de Norte de Santander. A corte de septiembre de 2020, agregó Castillo, más de 45.000 migrantes se encontraban en el departamento y, a enero de 2021, más de 19.000 venezolanos han llegado al país por este punto para llegar al interior de Colombia.
La situación en esta área se ha intensificado por el desplazamiento forzado de más de 5.000 colombianos y venezolanos que han llegado a los municipios de Arauquita, Saravena y Arauca, a causa del enfrentamiento entre las fuerzas militares venezolanas y disidencias de las FARC en el estado venezolano de Apure.
El gerente de fronteras de la presidencia de Colombia, Lucas Gómez, señaló que "es una población que... en su gran mayoría, tiene vocación de retornar" y que las autoridades están trabajando en la gestión de retornos "voluntarios y seguros".
Incluso, manifestó que ya se han producido 180 retornos y detalló que una comunidad indígena que había sido desplazada ya regresó a Venezuela.
El director de Migración Colombia, Juan Francisco Espinosa, manifestó que, hasta el momento, en Arauca se encuentra el 2,5% del total la población venezolana que vive en Colombia (1.742.000) y ocupa el undécimo puesto, a nivel departamental, con casi 45.000 migrantes.
A raíz de la situación en Apure, en Arauquita hay 57 puntos de concentración con 5.874 personas (4.139 venezolanos, 1.284 colombianos y 437 con doble nacionalidad), informó Espinosa.
En el territorio, agregó, se está gestionando el trabajo para prestar atención de techo, alimentación y protección de estas personas frente al COVID-19.
En 2020, 47.000 venezolanos se encontraban en Arauca y en enero de este año, la cifra bajó a 45.000, según Espinosa, generando una variación de 5,4%.
"Realmente, la situación del departamento determina más unas situaciones migratorias temporales o de movimiento que de estancamiento o de ubicación permanente del migrante", dijo Espinosa. Es decir, es un territorio donde hay un "tránsito permanente de migrantes".
Problemáticas en el territorio
El director de la autoridades migratoria explicó que en Arauca, la migración ha generado problemas alrededor de las migraciones, como la inseguridad, relacionadas con los enfrentamiento en la frontera colombo-venezolana.
Así mismo, una preocupación por una población que llega con problemas de salud o con riesgo de la propagación del COVID-19, así como el desplazamiento de la oferta de trabajo y la mendicidad en la que caen estos inmigrantes.
En este sentido, dijo Espinosa, el Estatuto de Protección Temporal para Venezolanos, anunciado por el presidente Iván Duque en febrero, va a "permitir la identificación del migrante venezolano, lo que facilitará la judicialización".
Entre otros de los beneficios de este estatuto, señaló que los inmigrantes se podrán incluir en el régimen de seguridad social en salud, los planes de promoción y prevención, y tendrán la posibilidad de competir "por un empleo en igualdad de condiciones" y, así, tener más oportunidades que se reflejarán en la disminución de la mendicidad.
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