“Nos queremos ir, nos queremos ir” corea un grupo de migrantes venezolanos, mientras muchos de ellos esperan sentados en una calle del sector de La Parada, ubicado a unos contados pasos del Puente Internacional Simón Bolívar, que une a Colombia y Venezuela.
Caminando o en buses, pero siempre con los costales cargados de ropa al hombro, algunos llegaron a Cúcuta desde diferentes ciudades de Colombia hace 4, 6 y hasta 8 días, y aún esperan que las autoridades venezolanas autoricen el paso para su país.
La falta de oportunidades laborales les impidió quedarse en el interior del país y dicen que la única salida es regresar al lado de su familia. Sin embargo, sostienen que la situación es precaria pues en el día a día deben soportar el sol inclemente -con temperaturas que llegan hasta los 37 grados centígrados- o, en otros casos, la lluvia.
Algunos acostados en el piso, otros debajo de cobijas, costales y materiales reciclados, que improvisan el cambuche, se quejan de la falta de atención por parte de las autoridades.
Así lo afirma Giovany, quien hace cuatro día llegó al punto fronterizo para dirigirse a la ciudad venezolanas de Barinas y señala que les avisan que tendrán paso franco a su país, pero al final de cuentas se quedan encallados en una fila.
"Acomódense que mañana pasan. Nos acomodamos, y pasan unos poquitos", le explicó a la Voz de América.
José Gregorio, por su parte, cocina con una estufa improvisada con ladrillos, una fogata y una olla vieja.
La mayoría de esta población, además, no cuenta con elementos de bioseguridad que protejan su salud.
¿Qué pasa del lado venezolano?
Mauricio Castillo es un venezolano que lleva seis meses viviendo en Cúcuta. Le dijo a la VOA que la situación de sus compatriotas es “totalmente caótica y precaria".
“Me preocupa la situación que están viviendo. Tienen como 8 días acá y no hay autoridad que les dé respuesta al respecto”, lamenta Castillo.
Además, se pregunta cómo funciona el protocolo del paso de venezolanos a su país, pues señala que "los que entran en bus pasan directamente y pasan a Venezuela. Ellos tienen una cuota y cuando esa no se completa con lo de los buses, se pasa con los de la cola, pero no pasan directamente si se quedan represados".
“Colombia se ha beneficiado mucho por la ayuda y no ha repartido nada (...) Y allá es lo que diga [Nicolás] Maduro", agregó.
Según Migración Colombia, hasta el miércoles, 71.052 venezolanos han retornado a su país, de los cuales 56.850 lo han hecho por el puente fronterizo Simón Bolívar.
El director de esta institución, Juan Francisco Espinosa, ha reiterado que Venezuela tiene una capacidad muy limitada para recibir migrantes.
"Tenemos una limitación muy fuerte en Norte de Santander. Logramos un acuerdo en el cual nos permitían el paso diario de 700 personas, pero en estos momentos estamos experimentando días en los cuales solo nos han recibido 80 personas", señaló Espinosa el martes, quien agregó que el domingo no hay posibilidad de paso.
Eso implica que las autoridades colombianas se vieron "obligadas" a restringir esta operación de retorno, porque puede "desbordar" la situación de Norte de Santander, de Villa del Rosario y de Cúcuta.
Espinosa aclaró que lo que se busca es proteger a las poblaciones colombianas y manifestó que Venezuela también está lidiando con la pandemia y tiene un grupo importante de venezolanos en su territorio.
También lea Colombia: ¿Qué debe hacer un venezolano para regresar voluntariamente a su país?El martes, la gobernación de Norte de Santander -departamento donde está ubicado este punto limítrofe- señaló que se han estudiado "las medidas de protocolos para garantizar los temas sanitarios y las propuestas para continuar coordinando de manera articulada la aglomeración de migrantes en zona de frontera y su respectivo cruce hacia su país de origen".
Así mismo, el gobernador Silvano Serrano Guerrero pidió el miércoles, en el desarrollo de la plenaria de la Comisión Segunda del Senado, apoyo del gobierno nacional.
"Necesitamos que el Ministerio de Salud nos acompañe de una mejor forma en la atención de este tema fronterizo, porque somos conscientes de que debemos estar preparados ante cualquier contingencia con los venezolanos que están llegando desde cualquier parte del continente y del interior del país”, sostuvo .
Por ello, el gobernador reiteró que deben redoblarse los esfuerzos en los departamentos fronterizos donde existe "un altísimo riesgo".