El gobierno tunecino dijo haber detenido a 12 personas vinculadas al ataque de la semana pasada en una playa turística, en el cual murieron 38 personas.
El atacante, Saif Rezgui, murió el pasado viernes en la ciudad de Susa tras el tiroteo. Las autoridades tunecinas habían afirmado que él fue el único que disparó, pero seguían averiguando si Rezgui recibió apoyo de otras personas antes del ataque.
El grupo Estado islámico se adjudicó responsabilidad, tal como lo hizo en el ataque de marzo pasado en el que perecieron 21 personas dentro del museo del Bardo, en Túnez.
Las autoridades declaran que ambos, Rezgui y el pistolero del Bardo entrenaron juntos en Libia.
La mayor parte de las víctimas en ambos ataques fueron turistas extranjeros. En el ataque del viernes pasado predominaban ciudadanos de Gran Bretaña pero también hubo alemanes, irlandeses, belgas y portugueses.