Honduras: ¿Cómo se vencen los obstáculos del COVID-19?

Mary Ramos es una maestra que tras quedar desocupada por la pandemia, vende frutas y verduras en Tegucigalpa, Honduras.

Tuvo que dejar de lado la docencia y hoy se dedica a la venta de frutas y verduras, en Honduras.

Su labor es la de educar a niños en centros escolares en Tegucigalpa, la capital hondureña, y nunca imaginó dejar aquello a lo que tanto dedicó años y años.

Mary Ramos es maestra y debido a la emergencia por el COVID-19 en el país, fue suspendida de sus labores. Pero la falta de empleo no solo no la detuvo, sino que la impulsó a emprender su negocio de venta de frutas y verduras.

"Yo era maestra. Estaba dando clases, pero ante esta situación yo busqué la manera para generar ingresos. Mi esposo se dedica a la construcción y también quedó sin trabajo. Al no haber manera de trabajar o darle de comer a nuestros hijos, porque tenemos cuatro, entonces buscamos la manera de generar ingresos", dice Ramos.

Ante la pérdida de sus ingresos como maestra, Mary Ramos, se dedica a la venta de frutas y verduras en Tegucigalpa, Honduras.

A esta hondureña, el deseo de cuidar de su familia y que no les falte nada, la obligó a que se dedicara al comercio, respetando todas las medidas de bioseguridad, mientras espera una salida a la pandemia.

"Tuvimos que buscar esta manera. Aunque no ganamos mucho ya que igual las personas han tomado esta opción también, pero sí se genera lo necesario para comer. Yo utilizo mascarilla, guantes, gel y espray para las frutas", indica Ramos.

Víctor Carraza es un capitalino que prefiere comprar sus frutas en estos puestos ya que así apoya a estas familias.

"Aquí todos debemos ayudar. Además evitamos las aglomeraciones como medida preventiva del COVID y sobre todo que estas personas pueden tener ingresos al no tener un trabajo", dice Carraza.

A causa del COVID-19 la economía de Honduras se ha visto afectada, ocasionando más de 120.000 suspensiones laborales, a la fecha, y van en aumento.