Al menos dos personas resultaron heridas este domingo tras un ataque de simpatizantes del gobierno del presidente Daniel Ortega en contra de opositores y periodistas, en lo que, según organizaciones de derechos humanos, parece ser una nueva escalada de violencia.
El hecho se dio en la ciudad de Masaya, ubicada a unos 26 kilómetros de la capital nicaragüense, cuando finalizaba un evento político. Verónica Chávez, codirectora del Canal 100%Noticias, fue golpeada en la cabeza con una piedra cuando acompañaba a su esposo Miguel Mora que participaba en la actividad.
Chávez fue movilizada a un hospital público del lugar y posteriormente trasladada a un centro privado en Managua en donde se le realiza una evaluación médica. Hasta el momento de esta publicación Chávez se encontraba en Cuidados Intensivos.
Por otro lado, el vehículo donde se movilizaba el opositor Félix Maradiaga fue dañado, y el coordinador de prensa de la opositora Unidad Azul y Blanco, Josué Garay resultó afectado por el ataque.
Según testigos en el lugar de los hechos, ambas agresiones ocurrieron frente a oficiales de la Policía Nacional, quienes se encontraban en el lugar y no reaccionaron a la agresión.
Los ataques se suman a una jornada de asedio y persecución contra opositores y periodistas que han dado cobertura este fin de semana a varias actividades de la oposición nicaragüense, que busca cohesionarse de cara a las elecciones del 2021.
El sábado se vivió una situación similar en la ciudad de León, donde la policía nicaragüense irrumpió en el lugar donde se realizaba una reunión opositora. Ese día se impusieron costosas multas a los conductores de los vehículos donde se movilizaban los activistas y reporteros.
“Esto es un robo, un robo a mano armada”, denunció Miguel Mora, luego de que su conductor fuera multado por supuestamente manejar de forma temeraria.
Condena por violencia
Tras los incidentes, organizaciones de la sociedad civil y el sector privado de Nicaragua condenaron los hechos y exigieron el cese de la “represión” contra opositores. El Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) , señaló el acto como “criminal” y denunció el acoso y agresión de simpatizantes del gobierno.
“Condenamos el acto criminal de paramilitares contra la periodista Verónica Chávez con la plena complacencia de la Policía. Denunciamos el acoso y agresión contra opositores que ejercen en forma cívica sus derechos constitucionales. Debe cesar todo tipo de represión y agresión”, dijo el Cosep.
Por su parte el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, Cenidh, exigió “respeto e integridad personal” contra los opositores.
Hasta el momento el gobierno del presidente Daniel Ortega no se ha pronunciado por estos incidentes.