Seis días lleva la ocupación de las oficinas del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Santiago, Chile, por parte de un grupo de representantes mapuches, el pueblo indígena más numeroso del país.
La Alianza Territorial Mapuche exige que Unicef se involucre de manera activa en los casos de maltrato policial a niños mapuches que, según denuncian, se producen en la zona de Ercilla, en la región de la Araucanía, ubicada en el sur del país.
Hace algunos días, una serie de fotografías de dos menores mapuches con heridas de balines, presuntamente provocadas por la policía, causaron revuelo en Chile luego de ser publicadas en varios medios chilenos y difundidas en redes sociales.
Desde el 27 de julio la sede de Unicef está tomada por la agrupación mapuche. Una de sus voceras, Mewlen Huencho, quien permanece en la ocupación, ha publicado sus declaraciones en su cuenta de Facebook: “Unicef no puede quedar en silencio a tanta violencia y represión a nuestras comunidades”, aseguró este miércoles.
A través de un comunicado, Unicef rechazó la toma. “Constituye una forma de presión que no compartimos, y que no responde a la neutralidad propia y reconocida de nuestra organización”, aseguró el Representante de Unicef para Chile, Tom Olsen, quien se reunió este lunes con los mapuches que mantienen la ocupación.
Tras la cita, Olsen declaró que “está fuera del mandato” de Unicef pedirle al Ministerio del Interior que retire las fuerzas policiales de las comunidades mapuches de la Araucanía, condición que los ocupantes exigen para finalizar la toma.
Tras la cita, la vocera Mewlen Huencho aseguró que no abandonarán las oficinas de la Unicef hasta que la organización “cumpla realmente su rol de proteger los derechos de nuestros niños”.
La institución afirmó que la toma ha provocado suspensión de sus funciones y que las oficinas se encuentran resguardadas por personal de seguridad de las Naciones Unidas. Sin embargo, Unicef ha declarado que no forzará el desalojo del lugar.
La semana pasada, el presidente chileno Sebastián Piñera se refirió a los menores mapuches baleados y aseguró que la situación se estaba investigando.
“Nosotros apoyamos cien por ciento a Carabineros de Chile (policía) y a la Policía de Investigaciones porque ellos tienen la obligación de resguardar el orden público y arriesgan sus propias vidas. (…) Pero evidentemente que no vamos a permitir que la acción policial se salga del marco de la ley”, declaró el mandatario en Canal 13, de la televisión local.
La Araucanía es la región de Chile con mayor presencia mapuche. En el país hay más de 600 mil personas que se declaran parte de dicha etnia, según el último censo realizado en 2002.
La Alianza Territorial Mapuche exige que Unicef se involucre de manera activa en los casos de maltrato policial a niños mapuches que, según denuncian, se producen en la zona de Ercilla, en la región de la Araucanía, ubicada en el sur del país.
Hace algunos días, una serie de fotografías de dos menores mapuches con heridas de balines, presuntamente provocadas por la policía, causaron revuelo en Chile luego de ser publicadas en varios medios chilenos y difundidas en redes sociales.
Desde el 27 de julio la sede de Unicef está tomada por la agrupación mapuche. Una de sus voceras, Mewlen Huencho, quien permanece en la ocupación, ha publicado sus declaraciones en su cuenta de Facebook: “Unicef no puede quedar en silencio a tanta violencia y represión a nuestras comunidades”, aseguró este miércoles.
A través de un comunicado, Unicef rechazó la toma. “Constituye una forma de presión que no compartimos, y que no responde a la neutralidad propia y reconocida de nuestra organización”, aseguró el Representante de Unicef para Chile, Tom Olsen, quien se reunió este lunes con los mapuches que mantienen la ocupación.
Tras la cita, Olsen declaró que “está fuera del mandato” de Unicef pedirle al Ministerio del Interior que retire las fuerzas policiales de las comunidades mapuches de la Araucanía, condición que los ocupantes exigen para finalizar la toma.
Tras la cita, la vocera Mewlen Huencho aseguró que no abandonarán las oficinas de la Unicef hasta que la organización “cumpla realmente su rol de proteger los derechos de nuestros niños”.
La institución afirmó que la toma ha provocado suspensión de sus funciones y que las oficinas se encuentran resguardadas por personal de seguridad de las Naciones Unidas. Sin embargo, Unicef ha declarado que no forzará el desalojo del lugar.
La semana pasada, el presidente chileno Sebastián Piñera se refirió a los menores mapuches baleados y aseguró que la situación se estaba investigando.
“Nosotros apoyamos cien por ciento a Carabineros de Chile (policía) y a la Policía de Investigaciones porque ellos tienen la obligación de resguardar el orden público y arriesgan sus propias vidas. (…) Pero evidentemente que no vamos a permitir que la acción policial se salga del marco de la ley”, declaró el mandatario en Canal 13, de la televisión local.
La Araucanía es la región de Chile con mayor presencia mapuche. En el país hay más de 600 mil personas que se declaran parte de dicha etnia, según el último censo realizado en 2002.