EE.UU. podría perder su triple A

El senador Tom Harkin, de Iowa, se mostró preocupado por las consecuencias que tendría para su estado si el Congreso no logra aprobar un aumento al techo de la deuda nacional.

El gobierno estadounidense está cerca de perder su evaluación crediticia triple A, es decir que es un cliente ejemplar, incluso si aumenta el techo de la deuda.

Estados Unidos podría perder su evaluación crediticia triple A incluso si el presidente Barack Obama y el Congreso llegan a un acuerdo en los próximos días sobre elevar el límite de la deuda.

Según la mayoría de los analistas financieros, Obama y los legisladores lograrán un acuerdo de última hora para elevar el techo de la deuda antes del plazo del martes, impidiendo que la nación caiga en un cese de pagos de sus obligaciones financieras.

Sin embargo, por lo menos una de las tres principales evaluadoras, Standard and Poors, Moodys, o Fitch, podrían degradar la clasificación crediticia del país porque el acuerdo final sobre la deuda quizá no sea suficiente para reducir el gasto del gobierno en los próximos años.

Ejecutivos de las agencias crediticias testificaron este miércoles ante un panel del Congreso que investiga su papel en alertar a Grecia sobre sus problemas de deuda, y ahora en relación a Estados Unidos.

La triple A es la máxima calificación crediticia que se puede recibir en el largo plazo. La deuda que la posee se considera que goza de una calidad extrema ya que tiene una mínima sensibilidad a un entorno adverso. Una posición por debajo, se encuentra la AA+, para productos de calidad superior con una escasa sensibilidad a un entorno adverso.

El rating es una calificación elaborada por empresas especializadas para valorar a los emisores de deuda según su solidez financiera, su capacidad de pago a diferentes plazos de tiempo (largo y corto), y su vulnerabilidad ante teóricos cambios del entorno exterior.