La Operación Coyote, un esfuerzo para terminar con las estructuras del crimen organizado que se dedican al tráfico de personas por la frontera sur de Estados Unidos, detuvo a 363 personas desde su lanzamiento en julio pasado.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que la iniciativa, cuyo objetivo principal es bajar sustantivamente el número de inmigrantes que llegan a EE.UU. por México usando coyotes o “facilitadores”, también permitió la incautación de $800 mil dólares en 438 cuentas bancarias de estas estructuras.
“Aunque nos complace que el número de migrantes que cruzan la frontera de manera ilegal en el Valle del Río Grande se ha reducido significativamente, seguimos decididos a perseguir a los coyotes que, por la desinformación y la explotación, fomentan la inmigración ilegal”, dijo el secretario de DHS, Jeh Johnson, en un comunicado.
La autoridad anunció que la operación continuará apuntando contra el crimen organizado que opera en la frontera entre EE.UU. y México, por lo que las familias que decidan usar un coyote para entrar ilegalmente a EE.UU. se arriesgan a perder el dinero invertido.
“Los migrantes y sus familias necesitan saber que, a la luz de nuestros esfuerzos más intensos, se arriesgan a perder grandes sumas de dinero destinadas a pagar por la actividad ilegal”, agregó Johnson.
El secretario también agradeció la colaboración de las autoridades mexicanas en el desarrollo de la operación.