El gobierno de Estados Unidos ha acusado a las autoridades de Irán de tener un pacto secreto con la red terrorista al-Qaeda para enviar dinero y combatientes desde el Oriente Medio a Afganistán y Pakistán.
El Departamento del Tesoro mencionó a seis individuos que según dijo eran miembros de un grupo de al-Qaeda que opera con respaldo del régimen de Teherán, y precisó que la célula estaba encabezada por un sujeto llamado Ezedin Abdel Aziz Khalil, quien lleva seis años activo en territorio iraní.
Un comunicado del Tesoro indicó que el grupo sirve de conducto para que al-Qaeda mueva fuentes de financiamiento, colaboradores y operativos, lo que pone al descubierto que Irán es un “punto crítico de tránsito” de dinero y extremistas que son enviados al sur de Asia.
Las sanciones impuestas por EE.UU. contra los seis miembros del grupo les congelan los activos que estos posean en territorio estadounidense y prohíben todo vínculo comercial o financiero con los inculpados.
Entre los sancionados figura Atiyah Abd al-Rahman, quien antes de la muerte de Osama bin-Laden ya había sido designado como enviado de al-Qaeda en Irán, luego de haber fungido como comandante de la red en áreas tribales en Pakistán.
De acuerdo con el comunicado, al-Rahman puede entrar y salir libremente de Irán con permiso de las autoridades iraníes.