La exestrella del fútbol brasileño Robinho se entregó a la policía para iniciar su sentencia de nueve años de prisión en su nativo Brasil, más de 10 años después de que fue acusado de violar a una mujer en Italia.
Robinho, de 40 años, dejó el jueves su edificio de apartamentos en Santos, a las afueras de Sao Paulo, en un vehículo policial.
Como lo dictan las leyes de Brasil se espera que pase las primeras horas bajo custodia en una audiencia ante el juez para discutir posibles irregularidades en el proceso que llevaron a su arresto.
Posteriormente será llevado a la penitenciaría, que las autoridades no han informado cuál será.
Horas antes, el Ministro de la Suprema Corte Luiz Fux negó el habeas corpus de Robinho y que le hubiera permitido seguir en libertad hasta que agotara todas sus apelaciones. Sus abogados piden un nuevo juicio en su país para el exfutbolista en Brasil, bajo el argumento de soberanía nacional.
Sentencia en Italia
Robinho, fue sentenciado en Italia a nueve años de prisión por estar vinculado en un abuso sexual grupal en 2013 cuando jugaba con el Milan.
Un tribunal de Milán encontró culpable en 2017 a Robinho y a otros cinco brasileños de violar en grupo a una mujer albanesa de 22 años tras emborracharla en un club nocturno. La condena fue confirmada por un tribunal de apelación en 2020 y validada por el Tribunal Supremo de Italia en 2022.
El tribunal brasileño no reabrió el debate sobre la condena por violación, centrándose únicamente en ver si la sentencia en Italia era válida en Brasil.
Brasil no extradita a sus ciudadanos, por lo que Italia solicitó su encarcelamiento en su país de origen.
El Superior Tribunal de Justicia de Brasil dictaminó el miércoles que el exdelantero Robinho tendrá que cumplir la condena en su país.
Los jueces del Superior Tribunal de Justicia (STJ) votaron 9-2 para ratificar la condena del ex del Real Madrid, Manchester City y AC Milan.
Robinho, cuyo nombre completo es Robson de Souza, estuvo en libertad durante todo el proceso de ratificación y "nunca ha representado un riesgo para la aplicación de la legislación nacional, por lo que su libertad es rigurosa hasta el fallo final del asunto", dijeron sus abogados en su petición.
Los abogados argumentaron que la decisión viola la jurisprudencia del Tribunal Supremo, que solo lo llevaría a la cárcel una vez concluidos todos los recursos posibles, y añadieron que hacer que el exfutbolista cumpla la condena en su país de origen "contradice frontalmente la Constitución de la República".
Según su defensa, en el momento de cometerse el delito no existía ninguna ley brasileña para el cumplimiento de condenas dictadas en otros países, y que la ley no podía aplicársele con carácter retroactivo.
[Con información de Reuters y AP]
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestros canales de YouTube, WhatsApp y al newsletter. Activa las notificaciones y síguenos en Facebook, X e Instagram.