El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo el jueves que su gobierno respeta al congreso de EE.UU., pero permitir la visita de las legisladoras demócratas Rashida Tlaib e Ilhan Omar significa dañar a Israel.
Netanyahu dijo que Israel considerará si les permite visitas familiares por razones humanitarias, reportó Reuters.
"No hay país en el mundo que respete más a Estados Unidos y al Congreso estadounidense que Israel", dijo Netanyahu en un comunicado. "Sin embargo, el itinerario mostró que la única intención de las congresistas era dañar a Israel".
Su comentario sigue al anuncio de que Israel decidió bloquear una visita de ambas legisladoras, según confirmó más temprano el jueves la viceministra de Relaciones Exteriores israelí, Tzipi Hotovely.
"Se tomó la decisión, la decisión es no permitirles entrar", dijo Hotovely a la Radio Reshet de Israel.
También lea Presidente Trump a legisladoras: "regresen" a los lugares de donde vinieronEl anuncio de Israel llegó momentos después de que el presidente Donald Trump escribiera en su cuenta de Twitter: "Mostraría una gran debilidad si Israel permitiera la visita de las representantes Omar y Tlaib. Odian a Israel y a todo el pueblo judío, y no hay nada que pueda decirse o hacerse para cambiar de opinión. Minnesota y Michigan tendrán dificultades para volver a ponerlas en el cargo. Son una desgracia!".
Trump ha sido un crítico abierto de Omar y Tlaib, quienes el año pasado se convirtieron en las dos primeras mujeres musulmanas elegidas para ocupar puestos en el Congreso.
Las congresistas han apoyado los derechos de los palestinos. Ambas han sido acusadas por otros miembros del Congreso de usar lenguaje antisemita, pero los líderes de ambos partidos habían dicho que se les debería permitir visitar Israel.
Las dos legisladoras tenían planeado visitar Jerusalén y Cisjordania en una gira organizada por una organización palestina destinada a resaltar la difícil situación de los palestinos. No estaba claro de inmediato si habían planeado reunirse con funcionarios israelíes y portavoces.
Omar denunció la decisión como "una afrenta" y "un insulto a los valores democráticos".
"Esto no es una sorpresa, dadas las posiciones públicas del primer ministro Netanyahu, quien ha resistido consistentemente los esfuerzos de paz, restringió la libertad de movimiento de los palestinos, limitó el conocimiento público de las realidades brutales de la ocupación y se alineó con islamófobos como Donald Trump", dijo la legisladora en un comunicado.
Tlaib, cuya familia emigró a los Estados Unidos desde Cisjordania, donde todavía tiene parientes cercanos, tuiteó una foto de su abuela y dijo que tiene derecho a vivir "en paz y con dignidad humana".
Israel dijo que consideraría cualquier solicitud de Tlaib para visitar a familiares por razones humanitarias.
El embajador de Estados Unidos en Israel, David Friedman, respaldó la decisión después de que se tomó, diciendo que Israel "tiene todo el derecho de proteger sus fronteras" contra los promotores de boicots.
Bloquearlos es la última escalada de la campaña de Israel contra el movimiento BDS, que aboga por boicots, desinversiones y sanciones contra empresas, universidades e instituciones culturales israelíes.
Los partidarios del movimiento de boicot dicen que es una forma no violenta de protestar contra las políticas israelíes y reclamar los derechos de los palestinos. Los críticos dicen que el esfuerzo apunta a deslegitimar a Israel y finalmente borrarlo del mapa, reemplazándolo por un estado binacional.
Reacciones en el Congreso
Los demócratas en el Congreso denunciaron la acción presidencial como una revocación de las garantías anteriores del embajador israelí en los Estados Unidos de que, "por respeto al Congreso de los Estados Unidos", no se negaría la entrada a ningún legislador.
La presidente de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi dijo que el desaire estaba "por debajo de la dignidad del gran Estado de Israel". La demócrata de California, que durante mucho tiempo fue partidaria de Israel, calificó la decisión de "profundamente decepcionante".
El líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, de Nueva York, dijo que la acción de Israel era un signo de debilidad en lugar de fortaleza, lo contrario a la afirmación de Trump, y "solo dañará la relación y el apoyo de Estados Unidos e Israel a Israel en Estados Unidos".
Los aliados republicanos de Trump en el Congreso, con pocas objeciones, no hicieron declaraciones.Los republicanos se han unido al presidente para tratar de estampar a Omar, Tlaib y demás miembros del "escuadrón" de cuatro legisladoras liberales nuevas como el corazón del Partido Demócrata.
El influyente grupo de presión estadounidense pro israelí, AIPAC, sugirió que la acción del jueves fue un paso demasiado lejos."No estamos de acuerdo con el apoyo de las representantes Omar y Tlaib al movimiento BDS contra Israel y contra la paz, junto con los llamados de la representante Tlaib para una solución de un solo estado", dijo AIPAC en Twitter."También creemos que todos los miembros del Congreso deberían poder visitar y experimentar de primera mano a nuestro aliado democrático Israel".