Israel no se dejará presionar para aceptar un Estado palestino, dijo el viernes el primer ministro Benjamin Netanyahu, tras un artículo del Washington Post, según el cual, el principal aliado de Israel, Estados Unidos, estaba promoviendo planes para establecer un Estado palestino.
"Israel rechaza categóricamente los dictados internacionales respecto de un acuerdo permanente con los palestinos", dijo Netanyahu, en una declaración publicada tras una conversación con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden. "Israel seguirá oponiéndose al reconocimiento unilateral de un Estado palestino".
Netanyahu dijo que la creación de un Estado sería una "enorme recompensa" tras el ataque dirigido por Hamás contra Israel el 7 de octubre, que desencadenó la última guerra en Gaza, y que un acuerdo solo puede provenir de negociaciones directas entre ambas partes. No ha habido conversaciones desde 2014.
También lea Secretario general de la ONU califica de "inaceptable" rechazo de Israel a solución de dos EstadosEl Washington Post informó el jueves de que Estados Unidos estaba trabajando con algunos países árabes, entre ellos Egipto, Jordania, Emiratos Árabes Unidos, Qatar y Arabia Saudí -con los que Israel lleva tiempo tratando de establecer lazos diplomáticos- en un plan de posguerra para la región que incluiría un calendario firme para el establecimiento de un Estado palestino.
El jueves, altos ministros israelíes rechazaron enérgicamente esta posibilidad, y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, que vive en un asentamiento de Cisjordania, afirmó que un Estado palestino supondría "una amenaza existencial" para Israel.
El Ministerio de Asuntos Exteriores palestino dijo el viernes que Netanyahu estaba invocando las negociaciones solo para que el proceso fracasara de nuevo. "El Estado palestino no es un regalo ni un favor de Netanyahu, sino un derecho impuesto por el derecho internacional y las resoluciones internacionales legítimas", afirmó en un comunicado.
Entre los obstáculos que impiden la creación de un Estado palestino está la expansión de los asentamientos israelíes en los territorios que Israel ocupó en la guerra de Oriente Próximo de 1967, que la mayoría de los países consideran que violan el derecho internacional y que separan a las comunidades palestinas entre sí.
En su ofensiva contra Gaza, Israel ha matado a más de 28.700 palestinos, según las autoridades sanitarias palestinas, ha arrasado gran parte de la franja y ha desplazado a la mayoría de sus 2,3 millones de habitantes.
Israel afirma que su objetivo es destruir a Hamás, cuyos combatientes dirigieron un ataque contra ciudades del sur de Israel en el que, según las autoridades israelíes, murieron 1.200 personas y 253 fueron hechas como rehenes.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestros canales de YouTube, WhatsApp y al newsletter. Activa las notificaciones y síguenos en Facebook, X e Instagram.