Consejo de Seguridad de la ONU analiza situación en Siria

Enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, explica la situación durante los intentos por extender el alto el fuego, que han continuado en los últimos días en Nueva York, con motivo de la Asamblea General de la ONU.

La ONU denunció hoy que al menos 139 personas han muerto en los últimos días por los ataques en la parte oriental de la ciudad siria de Alepo.

El Consejo de Seguridad de la ONU se reunió para analizar la situación en la ciudad siria de Alepo, que está siendo castigada por la aviación siria y rusa.

Acciones que han sido condenadas con firmeza por Naciones Unidas. La reunión fue convocada de urgencia por Estados Unidos, Francia y el Reino Unido.

Se trata de la segunda ocasión en algo más de una semana que se convoca una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad para analizar la situación en Siria.

La ONU denunció que al menos 139 personas han muerto en los últimos días por los ataques en la parte oriental de la ciudad siria de Alepo.

Así lo afirmó el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, al comparecer hoy ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

"Es la peor semana que vive" en los seis años del conflicto armado en ese país, anotó Mistura.

"Son días escalofriantes. No hay nada que justifique lo que está sucediendo ante nuestros propios ojos", agregó.

De Mistura dijo que otras 74 personas han perecido en la parte rural próxima a esa ciudad, para un total de 213 muertos.

El enviado especial de la ONU a la zona presentó un panorama desolador en cuanto a la situación que atraviesa el oriente de Alepo, donde cerca de 275.000 personas están "atrapadas de facto", sin alimentos ni agua potable.

Los equipos de emergencia "se sienten abrumados y no pueden responder ante estos ataques", añadió.

Organizaciones humanitarias han apuntado a la aviación siria y la rusa como los principales responsables de estos ataques que está sufriendo la zona, desde que el lunes pasado terminó el alto el fuego que habían negociado en Ginebra Estados Unidos y Rusia.