Cerca de cien congresistas en Estados Unidos enviaron una carta a la secretaria de Estado Hillary Clinton pidiendo la suspensión de la ayuda militar y policial a Honduras tras la muerte de otro periodista y las continuas violaciones a los derechos humanos en ese país.
El grupo de 94 líderes de la Cámara de Representantes de EE.UU. pidió en la misiva, la cual fue enviada a corresponsales de prensa, presionar al gobierno del presidente hondureño Porfirio Lobo. Además señala que en el país existe “un patrón de violaciones de los derechos humanos que afecta a líderes comunitarios, periodistas y activistas de la oposición sometidos a ataques, amenazas y ejecuciones extrajudiciales".
El canciller hondureño Arturo Corrales calificó las denuncias como "parciales" y dijo que viajará este miércoles a Washington para tratar "cuestiones relativas a la seguridad".
Mientras tanto, grupos defensores de derechos humanos en EE.UU. aumentaron su presión para que el presidente Lobo castigue a los responsables de las violaciones de los derechos humanos en el país centroamericano.
La situación escaló luego que Fausto Hernández, un locutor de radio, fuera asesinado a machetazos por desconocidos, según fuentes policiales de Honduras.
Entre 2003 y 2012, cerca de 22 periodistas hondureños han sido asesinados- la mayoría desde el golpe de Estado del 28 de junio de 2009-, sin que hasta ahora las autoridades hayan esclarecido los casos.