La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos abrió recientemente la llamada "Puerta de la Esperanza" en la valla que separa la frontera con México, para permitir que un puñado de familias se reuniera por tres minutos.
La Puerta de la Esperanza está ubicada en una parte de la frontera llamada Friendship Park. Allí los sábados y domingos se permite a las familias congregarse y pasar tiempo hablando con sus parientes del otro lado de la frontera, a través del muro que separa EE.UU. de México.
Gabriela Esparza, fue una de las elegidas el 30 de abril para reunirse con familiares. Esparza vive en California y generalmente los sábados ve a sus familiares que residen en México, a través de la valla fronteriza. Pero esta vez, fue diferente.
"Comenzamos a llorar" dijo Esparza a CNN, después de reunirse con su madre y su hermana "La última vez que las ví, yo tenía 16 años". Ahora soy madre tengo mi familia. Todavía no puedo creer que sucedió", indicó.
Esparza es una soñadora, beneficiaria del programa DACA, Acción Diferida para Niños que fueron traídos a EE.UU. por sus padres cuando eran menores de edad.
El presidente Barack Obama firmó en 2014 una orden ejecutiva que ofrece protección a estos inmigrantes y les permite trabajar legalmente por dos años. Pero la política ha sido apelada ante la Corte Suprema junto con una llamada DAPA, Acción Diferida para Padres de Estadounidenses.
La iniciativa de la Puerta de la Esperanza se realizó en honor de la celebración mexicana del Día del Niño, y fue organizada por los 'Angeles de la Frontera', un grupo sin fines de lucro de San Diego que lucha por la reforma de inmigración.