El demócrata Darren Soto se convirtió en el primer congresista de origen puertorriqueño de Florida elegido al Congreso de Estados Unidos, tras ganar las elecciones por el Distrito Nueve, en el centro del estado.
Soto obtuvo el 58% de los 324.132 votos sufragados en su distrito, según datos preliminares de la División de Elecciones de Florida que lo proyecta como el ganador de las elecciones al Congreso federal, frente a su rival, el candidato republicano Wayne Liebnitzy, que obtuvo el 42 %.
El distrito nueve está formado por parte de los condados de Orange, Osceola y Polk y fue creado durante la redistribución de distritos en 2011 para favorecer el voto hispano que hasta entonces estaba diluido.
Este triunfo revela el peso político que está logrando la creciente comunidad boricua en el centro del estado, a donde emigran debido a la crisis económica y financiera que vive la isla.
"Es como un sueño. Hicimos todo lo que pudimos para movilizar el voto hispano", dijo tras su victoria Soto, quien durante su campaña activó el voto de los puertorriqueños de su distrito, y de áreas como la ciudad de Kissimmee.
En esta zona más del 60 % de los votantes fueron a las urnas de manera temprana, favorecieron a los candidatos demócratas y donde el pasado domingo, el presidente Barack Obama apoyó públicamente a Soto, de quien se refirió como "el tipo de líderes progresistas que necesitamos".
Antes de ser electo al Congreso de Estados Unidos, Soto se mantuvo durante tres términos de dos años en la Cámara de Representante de Florida, y en 2012 hizo historia al ser el primer senador estatal de Florida de origen puertorriqueño.
Soto logra hoy un hito todavía mayor al alcanzar el Congreso federal, donde, según ha prometido durante la campaña, no solo trabajará para mejorar la calidad de vida de los residentes en su distrito, sino también la de los puertorriqueños en la isla.