Trump vuelve a pedir pena de muerte para asesinos de policías

El presidente Donald Trump con el fiscal general de EE.UU. William Barr durante una ceremonia en el Día Nacional de los Oficiales de Paz, en el Capitolio. Washington, mayo 15 de 2019.

El presidente Trump renovó el miércoles sus llamados para que los condenados por asesinar a policías reciban la pena de muerte.

Durante la trigésima octava ceremonia conmemorativa en Washington, por el Día Nacional de los Oficiales de Paz, Trump denunció la "retórica contra la policía" y se comprometió a apoyar a las autoridades policiales en la frontera y en las comunidades locales.

"Las emboscadas y los ataques a nuestra policía deben terminar, y deben terminar en este momento", dijo Trump en medio de aplausos.

"Creemos que los criminales que asesinan a los oficiales de policía deben - de inmediato -, pero con juicio recibir la pena de muerte. Pero rápidamente. El juicio debe ser rápido. Tiene que ser justo, pero debe ser rápido".

Trump sugirió primero en 2016, durante su campaña electoral, que los condenados por asesinar a oficiales de policía deberían recibir la pena de muerte, y lo hizo nuevamente el año pasado durante el evento del Día Nacional de los Oficiales de la Paz.

Este miércoles señaló que el número de oficiales muertos en emboscadas alcanzó un máximo de casi 30 años durante su primer año en el cargo, pero aseguró que la cifra se ha reducido en más de un 70 por ciento en los dos años posteriores.

Afirmó que su gobierno envió a los departamentos de Policía en todo el país "cientos de millones e incluso miles de millones de dólares" en equipo militar que no estaba siendo usado y que gobiernos anteriores "no quisieron enviar".

El servicio conmemorativo anual honró a 228 oficiales de la paz que murieron en el cumplimiento del deber el año pasado.

El presidente invitó al escenario a la familia de Ronil Singh, un oficial de policía de Newman, California, que fue baleado y asesinado a principios de este año durante una parada de tráfico por un hombre sospechoso de estar ilegalmente en EE.UU.

Trump sugirió que la muerte de Singh podría haberse evitado con leyes de inmigración más estrictas, refiriéndose al sospechoso como "un asesino vicioso que podría haberse mantenido fuera con seguridad fronteriza, con el muro, con lo que 'diablos' sea necesario".

“No se debe perder una vida estadounidense más porque nuestros legisladores han logrado asegurar nuestras fronteras. Se producen tremendos problemas en la frontera sur a causa de las drogas, de las personas equivocadas que se deja ingresar debido a un sistema corrupto y roto que se puede cambiar en 20 minutos. 20 minutos si quieren cambiarlo. Mientras tanto, tenemos que hacerlo de la manera más dura. Y no hay razón para eso", dijo el mandatario.

La familia de Singh elogió al presidente y le agradeció por ofrecer sus condolencias en el momento del asesinato.

El mandatario estadounidense también hizo una aparente referencia al caso del actor Jussie Smollett, diciendo que "los que presentan informes policiales falsos deben enfrentar todas las consecuencias legales".

Smollett fue acusado de un delito grave de conducta desordenada y acusado de hacer una denuncia policial falsa después de afirmar que fue atacado. La oficina del fiscal del estado del Condado de Cook retiró los cargos abruptamente en marzo.

Trump volvió a invocar la frontera sur más adelante en el discurso, pidiendo al Congreso que "arregle nuestras terribles leyes de inmigración", entre las que mencionó la política de captura y liberación, donde los inmigrantes ilegales son atrapados y dejados en libertad dentro del país hasta que son llamados a una audiencia de inmigración para determinar sus casos.

El presidente también pidió el fin de las ciudades santuario y del programa de lotería de visas de diversidad, donde dijo "un país te coloca en una lotería y luego te deposita en Estados Unidos. No creo que la mayoría de los países nos estén dando sus mejores personas", concluyó.

El programa de lotería de visas es un instrumento del gobierno de Estados Unidos, donde las personas se registran en un portal del Departamento de Estado.

Los nuevos llamados del presidente para que el Congreso promulgue reformas de inmigración tienen lugar un día después de que funcionarios de la Casa Blanca se reunieran con senadores republicanos para presentarles la más reciente propuesta de inmigración del gobierno.