El director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel se unió el miércoles a las voces contra el proceso para reescribir la constitución venezolana y pidió la suspensión de la iniciativa que impulsa el presidente Nicolás Maduro, quien descartó la víspera que vaya a retirarla pese a la exhortación que han hecho gobiernos como Estados Unidos, que ha amenazado con sanciones económicas.
Aunque durante años fue colaborador del gobierno de su país, el músico de 36 años reconoció que Venezuela vive los "momentos más oscuros y complicados" en un artículo que publicó en los diarios The New York Times y El País.
"Nuestro país necesita urgentemente sentar las bases de un orden democrático que garantice la paz social", escribió Dudamel, director musical de la Filarmónica de Los Ángeles, donde vive, al pedir al gobierno que suspenda la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente, cuyos miembros serán electos el 30 de julio. "Buscar la victoria a través de la fuerza y la imposición de las ideas propias es y será siempre una derrota colectiva para Venezuela", agregó.
El talentoso músico, también director de la Orquesta Simón Bolívar de Venezuela, ya había pedido a las autoridades escuchar a los miles de manifestantes que casi a diario salen a las calles para protestar contra el gobierno. Dudamel se pronunció un día después del fallecimiento del violinista Armando Cañizales, de 18 años, quien murió el 3 de mayo tras sufrir una herida en el cuello por un disparo que recibió en medio de una manifestación opositora.
Cañizales era miembro del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles, un organismo de educación musical financiado con fondos oficiales en el que también estudió Dudamel.
Maduro ratificó el martes, tras activar el órgano de consulta de los poderes público conocido como el "Consejo de Defensa de la Nación", que seguirá adelante con el proceso constituyente. El gobernante cuestionó el pronunciamiento que realizó a inicios de semana el gobierno del Donald Trump, quien advirtió que aplicaría sanciones económicas contra Venezuela de seguir adelante con la Asamblea Constituyente.
El gobernante venezolano envió a Naciones Unidas y la Unión Europea una alta comisión, encabezada por el canciller, para denunciar las amenazas de sanciones de Trump. Maduro había anunciado el envió de la comisión el miércoles.
Ese mismo día, el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino López, se pronunció en respaldo de la Asamblea Constituyente y rechazó enérgicamente las amenazas de sanciones económicas hechas por la Casa Blanca si Maduro continúa con sus planes de la Constituyente.
Este jueves, un paro nacional que arrancó a las seis de la mañana, convocado por la oposición, mantiene las calles vacías, centenares de comercios cerrados y algunas vías bloqueadas con barricadas hechas con escombros, árboles y basura en Caracas.
La medida de hecho, que se extenderá hasta el viernes, busca presionar una vez más al gobierno del presidente Nicolás Maduro y su iniciativa para reescribir la constitución de Venezuela.
En algunas ciudades del interior del país también se registró una paralización de actividades, reportaron medios locales.
Con información de AP