El acuerdo humanitario alcanzado entre el gobierno interino de Juan Guaidó y el poder ejecutivo en disputa de Nicolás Maduro para hacer frente a la COVID-19 puede abrir la puerta a una negociación política más trascendental en Venezuela, según analistas.
Este martes, el despacho de Guaidó reveló su acuerdo con el madurismo para que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) reciba los fondos aprobados para ayuda humanitaria. Jorge Rodríguez, responsable de comunicaciones del Palacio de Miraflores, y el canciller chavista Jorge Arreaza lo confirmaron.
Según la oposición, Maduro se comprometió a “no poner obstáculos a la ejecución del programa y se garantizara que los recursos destinados pudiesen ser ejecutados”. La fase inicial de la cooperación incluye la dotación de equipos de protección para el personal de salud, la mejora de la capacidad de diagnóstico y el tratamiento clínico de casos confirmados.
Miguel Pizarro, comisionado de Guaidó en las Naciones Unidas, explicó que el acuerdo se gestó para “ayudar a salvar vidas en un momento en el que la epidemia está escalando”.
El gobierno en disputa ha reportado 1.819 casos positivos y 18 muertes por la COVID-19. En mayo, la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales de Venezuela advirtió que había un subregistro de casos confirmados de al menos un 63%. También, afirmó que las pruebas realizadas eran “insuficientes” para estimar “el tamaño real de la epidemia” en el país.
Pizzaro, en declaraciones publicadas en la página web de la presidencia de Guaidó, dijo que el acuerdo era “estrictamente técnico” y enfatizó en que “no es el comienzo de negociaciones políticas”.
“Esto permitirá salvar miles de vidas, pero en Venezuela son millones las vidas que están en riesgo y salvarlas solo depende de la conformación de un gobierno de emergencia nacional”, tal y como plantea el propio Guaidó y secunda Estados Unidos, declaró.
A través de un mensaje en Twitter de su embajada virtual en Venezuela, el gobierno de Estados Unidos resaltó el acuerdo que prioriza las “necesidades urgentes de atención médica de venezolanos”.
“Es un paso importante, pero solo [la] transición democrática salvará Venezuela de [la] catástrofe”, añadió el ejecutivo estadounidense.
También lea Maduro y Guaidó logran acuerdo sobre fondos de la OPS contra la pandemiaHuniades Urbina, presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría y miembro del equipo asesor de Guaidó que coordinará la ayuda humanitaria, celebró que expertos independientes puedan estar en la primera línea de batalla contra la COVID-19.
“Nos parece perfecto que finalmente se sienten en una mesa con las personas técnicas, como somos los médicos venezolanos”, expresó a la Voz de América.
El médico hizo votos porque la ayuda humanitaria sea distribuida a grandes masas en Venezuela sin “sesgo” ni politización.
Julio Castro, principal vocero del comité asesor de Guaidó sobre la pandemia, les actualizará en las horas por venir sobre los alcances y pormenores de su trabajo, precisó.
“Castro es una persona íntegra y capacitada para ayudar a esa distribución”, indicó Urbina.
Zona de oportunidad
Mibelis Acevedo, analista y articulista, opina que el acuerdo evidencia un acercamiento entre el madurismo y su oposición, al margen de la tensa confrontación pública.
“Hay conciencia de una gravedad que ya no se puede ignorar, del peso de la crisis de base. Se entiende que ningún bando puede resolver esto por sí solo”, analiza en entrevista con la VOA.
Considera, además, que el pacto es el resultado de las presiones de la sociedad civil organizada, que desde hace años aboga por alcanzar acuerdos humanitarios en Venezuela.
El ganador, dice Acevedo, es el pueblo, no algún político determinado. “Gana la gente que está sufriendo, la gente que está amenazada por la COVID-19 y la situación de merma general. Es un logro que podría perfectamente capitalizar la dirigencia”, examina.
El convenio sobre la COVID-19 puede simbolizar una puerta de entrada a negociaciones sobre temas de igual envergadura, como las elecciones o una eventual transición.
Stalin González, diputado de oposición y delegado de Guaidó en las conversaciones privadas con el madurismo del año pasado, escribió en Twitter sobre el tratado de salud: “un pasito pequeño, pero importante para lograr un acuerdo integral”.
Acevedo pide valorarlo en lo inmediato como un triunfo de la sensatez política, que, a su juicio, sí es capaz de arar el camino hacia futuras articulaciones.
“Esto no implica una rendición”, acota. “Esto abre una zona de oportunidad que pudiese incidir en futuras negociaciones, quizás más complejas y de mayor alcance”, apunta.
También lea EE.UU. insta a Maduro a cesar los "ataques" a Guaidó y la Asamblea NacionalResalta el esfuerzo de ambas fuerzas políticas en disputa en Venezuela para reconocer al adversario luego de confrontaciones borrascosas durante los últimos 18 meses.
“Es fundamental para negociar”, recalca.
La noticia sobre el concierto de esfuerzos con el madurismo, sin embargo, reflotó críticas de un sector de la oposición. Antonio Ledezma, ex alcalde de Caracas, reaccionó con aspereza.
“Mire, presidente Guaidó, con todo mi respeto, el acuerdo prioritario que usted tiene que firmar es con la DEA para que se lleve a esa pandilla de narcos”, escribió.
El dirigente político, hoy en el exilio, llamó al de Maduro un “régimen venenoso”. “No habrá plan de salud que valga, hasta que no nos curemos de ese mal diabólico”, finalizó.
Por contra, Mauro Zambrano, sindicalista del sector salud en Venezuela, aplaudió la decisión. “Es por la gente. Es necesario llegar a acuerdos para ayudar a la gente que tanto sufre en nuestros centros de salud, el paciente, el trabajador”, dijo a la VOA.
Zambrano se mostró esperanzado en que el acuerdo entre Guaidó y Maduro multiplique la disponibilidad de guantes, mascarillas, medicinas y reactivos de laboratorios.
Llamó a las partes políticas a incluir en sus conversaciones la concreción de mejores salarios y el pago del bono de 100 dólares a médicos y enfermeros, prometido por Guaidó.
(*) Las periodistas Carolina Alcalde y Adriana Núñez Rabascall colaboraron con este reportaje desde Caracas.