Un funcionario militar estadounidense dijo que los barcos cargueros iraníes que pueden haber estado llevando armas a los rebeldes hutíes en Yemen se están alejando de ese país.
La noticia coincide con las declaraciones del ministro de Exteriores yemenita, Riad Yassine, en que acusó a Irán de intentar romper un bloqueo naval que buscaba evitar que más armas llegaran a manos rebeldes.
“Irán, que se supone está enviando ayuda y medicinas al pueblo yemenita, todavía sigue enviando barcos cargados con armas, como si quisieran encender el conflicto otra vez”, dijo Yassine.
El Pentágono ha desplegado barcos de guerra en aguas yemenitas para asegurar que el importante canal naviero en el Golfo permanezca abierto, pero han negado que la flota esté allí para interceptar barcos iranís.
El jefe de la Operación de Naciones Unidas en Yemen, Paulo Lembo, remarcó que el conflicto debe ser resuelto en la mesa de negociaciones.
“Estoy convencido que el reinicio de las conversaciones de paz es inevitable. No creo que sea posible en este momento hablar de una fecha específica, el momento, cuándo y dónde vaya a ocurrir, pero va a ocurrir. Todas las partes están conscientes que no hay otra solución que no sea una salida política negociada diplomáticamente”.
Mientras tanto, el secretario de Naciones Unidas, Ban Ki-moon nombró al diplomático mauritano, Isamil Ould Cheikh Ahmed, como su nuevo enviado especial a Yemen.