Rebeldes hutíes tomaron control del cuartel de una brigada militar en Taiz, la tercera ciudad más grande de Yemen, mientras continuaban los combates en tierra y en el puerto de Adén.
Luego que los rebeldes tomaran la base que antes estuvo en manos de las fuerzas que apoyan al presidente Abd-Rabbu Mansour Hadi, el área fue bombardeada desde el aire.
Arabia Saudita había declarado el fin de la campaña aérea que mantuvo durante un mes, la cual buscaba detener los avances hutíes, pero el martes dijo que su nuevo enfoque en apoyar una salida política también podría incluir acciones para prevenir que los rebeldes adquirieran o usaran armas del ejercito yemenita.
Irán, que apoya a los hutíes, aplaudió lo que llamó el fin “de la matanza de inocentes e indefensos civiles” y dijo que la decisión es “un paso hacia delante” hacia una resolución política.