Las agencias de la ONU han entregado 23 toneladas de artículos de higiene a civiles en la región este de Ucrania controlada por los rebeldes, dijo la ONU el viernes.
Esta fue la segunda vez este mes que a un convoy humanitario organizado por la ONU se le permitió cruzar la línea de 500 kilómetros, que separa a las fuerzas gubernamentales ucranianas de los rebeldes respaldados por Rusia. La primera entrega el 15 de abril consistió en 18 toneladas de suministros para la lucha contra el COVID-19.
Jens Laerke, portavoz de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, dijo que el único punto de cruce en el país dividido había estado cerrado desde el 24 de febrero, por motivos de seguridad.
"La reapertura es bienvenida, ya que las necesidades siguen siendo muy altas con casi 1,7 millones de personas que necesitan asistencia en las áreas no controladas por el Ggobierno de Donetsk y Lugansk", dijo Laerke. "Los ancianos, las personas con discapacidades, los hogares encabezados por mujeres y los niños se encuentran entre los más vulnerables".
El acceso humanitario a la zona separatista ha sido extremadamente difícil desde marzo. La pandemia de COVID-19 ha restringido severamente el movimiento a través de la línea de contacto. Eso ha limitado la capacidad de las personas en el este de ir al lado del gobierno de la línea de demarcación para cobrar sus pensiones y prestaciones de bienestar social.
Laerke dijo que las restricciones al acceso humanitario a la región han creado grandes dificultades para las personas que sufren problemas económicos y de salud debido al COVID-19, que está empeorando significativamente.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que las infecciones por COVID-19 en Ucrania han aumentado a más de 2 millones de casos, incluidas 41,700 muertes.
“En marzo, Ucrania experimentó una triplicación del número de casos de COVID-19 en todo el país, en comparación con febrero”, dijo Laerke. “Entonces, la curva va hacia arriba y no hacia abajo… Por supuesto, como ha habido un largo período sin entregas, existe, si se quiere, una demanda reprimida de ayuda. Así que esperamos que esto continúe y aumente”.
Laerke dijo que el acceso humanitario a Donetsk no era el único requisito. Dijo que también se necesitaba dinero para brindar apoyo para salvar vidas a casi 1,7 millones de personas. Desafortunadamente, agregó, la ONU está muy escasa de efectivo ya que ha recibido solo el 13 por ciento de su apelación de $ 168 millones para Ucrania este año.
