Cerca de dos años deben esperar los migrantes para una consulta legal gratuita en el estado de Nueva York, en Estados Unidos. Es por eso que el proyecto de ley de Acceso a Representación Legal (ARA, por sus siglas en inglés), el primero de esta índole en toda la nación, convertiría en un derecho el ser representado a nivel estatal por un abogado en sus citas con las autoridades migratorias.
“Cuando llegué a este país yo tenía un total desconocimiento de qué es un asilo, una visa T, no hablaba el inglés ni nada de eso”, comenta Nirvana García, migrante mexicana LGBTQ.
A consecuencia, García, una persona transgénero con un caso complejo a sus espaldas, por poco pierde su caso.
“No entendieron mi historia, me dijeron que podía ser deportada, al menos yo entendí así, entonces me dio mucho miedo y dije prefiero estar ilegal”, continúa García.
El acceso a representación legal daría luz a muchos casos como el suyo y la oportunidad a los más de 65.000 migrantes que han llegado recientemente a Nueva York de reconstruir sus vidas y contribuir a la economía del país.
“Ahorita mis sueños en este país es ayudar a mi familia y ya con un negocio”, dice Amílcar Rojas.
Este proyecto de ley precisa de 130 millones de dólares en fondos que deberán ser aprobados en el presupuesto estatal, y la fecha límite para ser incluidos es este primero de abril.