Un duro golpe contra el tráfico humano fue el resultado de la "Operación Lucero" que llevó a la captura de 36 traficantes de personas y la liberación de 39 inmigrantes indocumentados, en su mayoría menores de edad.
El operativo en conjunto contó con la colaboración de autoridades en El Salvador, Guatemala, México y Estados Unidos.
Según informó el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) todos los detenidos son sospechosos de traficar con cientos de personas en el intento de hacerlas ingresar ilegalmente al país a través de Texas.
"Esta operación fue el resultado directo de las sociedades que hemos construido y seguiremos construyendo. Estamos mandando un mensaje claro a los traficantes de personas de que cruzar fronteras no les protegerá de los largos brazos de la Justicia", indicó la directora de ICE, Sarah Saldaña.
La investigación que resultó en el arresto de los supuestos traficantes empezó en junio de 2014 y fue gracias a una llamada a la línea de información que alertó sobre actividades sospechosas de tráfico humano.