El gobierno interino de Honduras ha rechazado un ultimátum de la Organización de Estados Americanos para que reinstale al depuesto presidente Manuel Zelaya.
El hombre al que los legisladores hondureños nombraron como presidente interino, Roberto Micheletti, dijo el miércoles que su gobierno no cederá a presiones externas.
Agregó que está confiado en que Honduras no será aislada por largo tiempo, y que otras naciones comenzarán a ver cómo su gobierno ha salvado al país.
Mientras tanto, Zelaya fue a Panamá para asistir a la toma de poder del entrante presidente Ricardo Martinelli.
Zelaya ha dicho que retronaría a Honduras este jueves, pero posteriormente postergó sus planes para coincidir con un plazo establecido por la Organización de Estados Americanos.
La OEA ha dado a Honduras hasta el sábado para que retorne a Zelaya al poder, o será expulsado de la organización regional. Zelaya actualmente enfrenta arresto si regresa a su país.
El portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, dice que Estados Unidos apoya el plazo otorgado por la OEA.
También confirmó que funcionarios del Departamento de Estado y del Consejo de Seguridad Nacional se reunieron con Zelaya, en la sede de la OEA, en Washington.
