Este viernes, inmigrantes protestarán nuevamente frente a la Casa Blanca con el fin de presionar al gobierno para reformar el sistema de inmigración del país.
La organización CASA informó que la medida busca aumentar la visibilidad del problema migratorio tras el resultado de las elecciones legislativas del 4 de noviembre.
"Particularmente, a la luz de esta coyuntura crítica en el futuro de nuestro país, el presidente debe actuar con decisión, en términos generales, y rápidamente", dijo Gustavo Torres, director ejecutivo de CASA, en un comunicado. “Alivio administrativo debe incluir a todos los trabajadores y padres, a pesar de sus años en Estados Unidos, que conforman la familia [estadounidense].
En una conferencia de prensa, el presidente Barack Obama dijo que esperará a ver cuál es la propuesta del nuevo Congreso respecto de inmigración, pero que está listo para usar sus facultades ejecutivas si ve que el asunto no se mueve.
A su vez, el presunto líder del nuevo Senado, Mitch McConnell, advirtió al presidente Obama de no usar una acción ejecutiva, ya que eso sería como “agitar una bandera roja al frente de un toro”.
A principios de junio, Obama dijo que iba a aplicar una acción ejecutiva para resolver la crisis de la inmigración. Posteriormente anunció que volvería a retrasar la medida hasta después de las elecciones.
La demostración del viernes incluirá una conferencia de prensa y la presentación de testimonios de familias que han sido perjudicadas por la inacción del gobierno en el tema migratorio, se informó.