Después de una campaña de esperanza y cambio, Barack Obama llegó a la presidencia con un alto índice de aprobación pública y altas expectativas de parte de los estadounidenses de realizar grandes cambios en este país cuya economía e imagen internacional, entre otras áreas, necesitaban ayuda.
Después de un año en el mandato, Obama ha tenido algunos logros significativos, pero también ha dejado que desear en algunos aspectos, dicen analistas políticos.
Entre los logros de Obama se encuentran sus iniciativas para estimular la economía y el conseguir que el Congreso aprobara una reforma al sistema de cuidado de salud.
“No es el plan que prometió”, dijo John Feffer, uno de los directores de estudios de política externa del Instituto para Estudios de Política, a voanoticias.com. “Pero han sido 100 años que los políticos han hablado de hacer cambios, así que se le tiene que dar crédito al presidente”.
El Instituto para Estudios de Política, entidad de ideología liberal, publicó un informe que califica el primer año de Obama con un 6,5 y dice que la política del nuevo presidente es mejor que la del gobierno anterior de George W. Bush, pero que no han habido muchos cambios fundamentales.
“Obama ha obtenido el puesto más alto en un país con un sistema político comprometido a servir los intereses especiales de grupos élites”, dice el reporte. “Estos intereses no permiten que se tomen las acciones políticas audaces que son necesarias para superar los retos que nuestro país enfrenta”.
Un ejemplo que cita el reporte es que para ayudar a los desempleados, Obama extendió el programa estatal llamado seguro de desempleo –el cual está financiado por empleadores y por préstamos del gobierno federal– pero que no ha invertido fondos para reestructurar la economía y descentralizar la riqueza.
“(Obama) ha tomado medidas que según él iban a mejorar la economía, pero nos hemos dado cuenta que ese no es el caso”, dijo Israel Ortega, analista de la Fundación Heritage, entidad de ideología conservadora.
Porque la prioridad en la agenda de Obama era la economía, el asunto de la reforma migratoria no se resolvió en su primer año.
“Creo que ha evitado la cuestión de la inmigración, lo que es una lástima porque había un consenso de ambos partidos de que se necesita una reforma integral”, dijo Feffer.