El recién electo presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, descartó la aprobación de una reforma migratoria integral mientras Barack Obama sea presidente.
Ryan, que a sus 45 años es el presidente de la Cámara más joven en el último siglo, dijo el domingo al programa Meet the Press de la cadena NBC y a otras cadenas, que no cree que se pueda confiar en el presidente en tema migratorio.
“Él trató de darle la vuelta al Congreso con una orden ejecutiva para reescribir las leyes unilateralmente. Los presidentes no hacen las leyes, el Congreso hace eso. Así que, sí, yo no creo que debamos abordar y no abordaremos una legislación inmigratoria con un presidente en el que no podemos confiar en este tema”, dijo Ryan.
El republicano aceptó en cambio aceptó que quizá puedan hacerse otras cosas más pequeñas relacionadas con la inmigración.
“Si creemos, y tenemos consenso, en cosas como el cumplimiento de la ley en la frontera y en la seguridad interior, eso estaría bien”, agregó.
Su decisión significa que cualquier prospecto de hacer la reforma queda descartado hasta por lo menos 2017, cuando Obama haya dejado la presidencia. También ayuda a evitar choques con los legisladores más conservadores del tea party, que se han opuesto a dar "amnistía" a los inmigrantes indocumentados.
Ryan también se refirió a la agenda que su partido tiene por delante para probar que son capaces de gobernar y proponer.
“Tenemos que tener una visión y ofrecer una alternativa a este país para que vean que tenemos la oportunidad de liderar si llegamos a ganar la presidencia y mantener el Congreso… Así es como se arreglan todos los problemas que encaran las familias trabajadoras”, remarcó.
