Un primer lote con 2.000 dosis de la vacuna rusa contra la COVID-19, la Sputnik V, llegó el viernes a Venezuela, primer país de la región que participará en la fase 3 del desarrollo clínico de ese fármaco.
Consultado por la Voz de América, Huníades Urbina, presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría (SVPP), institución que desde agosto ha alertado que no consideran conveniente que pacientes venezolanos formen parte del estudio, reiteró que desconocen la seguridad de la vacuna.
Urbina insistió en que la vacuna no tiene “precalificación por la Organización Mundial de la Salud (OMS)”, por lo que la considera “riesgosa” por no tener resultados de otras fases.
“Al no tener una clara evidencia de la seguridad con la cual se están produciendo los resultados de esta vacuna, desde la OMS para abajo en el gremio científico mundial hay dudas y mucho escepticismo en relación con esta vacuna”, reiteró.
El presidente de la SVPP dijo que al no tener resultados previos, esta etapa de experimentación es más riesgosa.
“Como no sabemos qué pudo haber sucedido con los resultados anteriores a esta fase, entonces por eso desde nuestra Sociedad de Pediatría y la Academia Nacional de Medicina, seguimos insistiendo en que no estamos de acuerdo con que pacientes venezolanos estén en este estudio”, señaló.
El especialista destacó la “opacidad” que rodea a la vacuna ante la escasa información divulgada por el gobierno ruso y sostiene que desconocen quienes serán las personas que en Venezuela participarán en el estudio.
“Hemos hecho llamados de alerta al gobierno nacional, que digan públicamente, cómo debió haber dicho el gobierno ruso, los factores de seguridad que se han desarrollado durante esta etapa de experimentación de la vacuna Sputnik V”, añadió.
El experto subrayó que “no están en contra de ninguna vacuna porque es una esperanza que puede haber en la población para tratar de frenar la academia”, pero ratifica que la comunidad científica necesita toda la información necesaria sobre la vacuna.
La vacuna de la discordia
En tanto Delcy Rodríguez, vicepresidenta del gobierno en disputa de Nicolás Maduro, expresó satisfacción por la llegada de las vacunas y dijo que participarían del suministro y la producción de la vacuna en Venezuela.
“Es realmente una inmunidad duradera frente a otros tipos de vacunas que se están ensayando pero que tienen corta vida de protección y de inmunidad para el ser humano, es una vacuna segura además” sostuvo.
El ministro de Salud del gobierno de Maduro, Carlos Alvarado, adelantó que el ensayo comenzará en los próximos días con 2.000 personas.
A través de su cuenta en Twitter, el presidente interino, Juan Guaidó, cuestionó que venezolanos sean sometidos a la vacuna como parte de la etapa de experimentación.
“La dictadura haciendo lo único que sabe hacer: mentir y entregarse a intereses ajenos a los venezolanos. Es una prueba y usan a nuestra gente como conejillos de indias. Que sea el dictador el primero, aunque en lo único en lo que va de primero es en delitos y daños al país”, dijo Guaidó.
Recientemente Maduro había adelantado que las vacunas llegarían para “ensayos clínicos” y propuso que se evaluara la posibilidad de suministrar la vacuna rusa a los candidatos a las elecciones legislativas previstas para diciembre.
“Celebro que Rusia sea el primer país del mundo que va a vacunar masivamente a su población. Llegará el momento en el que nos vacunemos todos, el primero que se va a vacunar soy yo, pum, me voy a poner la vacuna para dar el ejemplo”, dijo Maduro en agosto.
Ese mes, el presidente ruso, Vladimir Putin, anunció que “por primera vez en el mundo, se ha registrado una vacuna contra el nuevo coronavirus”, una declaración que desató cuestionamientos por parte de la comunidad científica mundial, incluyendo a la OMS.