El control de la migración irregular en la frontera entre Estados Unidos y México es uno de los temas de más interés para aquellos que viven a solo pasos de la barrera física entre los dos países y quienes en su momento también fueron indocumentados, pero hoy pueden votar.
Una autorización del Departamento de Defensa para mantener hasta el año fiscal 2020 a 5.500 militares en la zona, incluye la casa de María de los Ángeles Márquez, en Socorro, Texas.
María cruzó de Chihuahua, México, hacia Estados Unidos hace 28 años con 4 hijos. Estuvo 8 años indocumentada, pero ya es residente y está tramitando su ciudadanía para poder votar.
María de los Ángeles Márquez cruzó la frontera hacia Estados Unidos con 4 hijos hace 28 años.
Ella dijo a la Voz de América que la presencia de los militares los beneficia.
“Como yo vivo aquí, a la orilla del río, pienso que a mí sí me está beneficiando”, explicó María. “Aquí pasa mucha gente y no sabemos cómo vienen, y a veces a nosotros nos da miedo”.
Para el agente de la Patrulla Fronteriza Mario Escalante, la presencia del ejército en la zona ha sido efectiva.
“Se ha visto una gran reducción (de inmigrantes indocumentados), gracias a ellos”, dijo Escalante a la VOA desde su vehículo de patrulla en un lugar de la frontera. “El año pasado nos podíamos haber estacionado aquí y las personas tú las estarías viendo cruzar”.
“Aquí teníamos mucha presencia de la Guardia Nacional. La presencia de ellos disuadía a muchos, y ese es exactamente el tipo de impacto que queríamos nosotros”, agregó.
Para el agente de la Patrulla Fronteriza Mario Escalante, la presencia del ejército en la zona de Socorro, Texas, ha sido beneficiosa en la lucha contra la inmigración ilegal.
Héctor Durán, quien es ciudadano estadounidense, piensa que es un gasto inútil.
“Me duele mi bolsillo, porque ellos podrían estar haciendo algo más beneficioso para Estados Unidos”, dijo.
Para María de los Ángeles Márquez, es bueno que se esté protegiendo la frontera para que no entre “gente mala”, pero también quisiera que hubiese más oportunidades para otras personas.
“Son nuestra gente de allá (en México) y yo si quisiera que (el presidente Donald Trump) le diera un chance de que ellos, que vengan a empezar como yo empecé”, dijo a la VOA.
María pronto será también ciudadana estadounidense.
“Deseo ser parte del nuevo electorado que acudirá a las urnas en noviembre, porque es muy importante votar”.
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